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Dos meses para aprobar Madrid Nuevo Norte

El nuevo entorno contará con un espacio de oficinas y con la torre más alta de España, de 70 alturas
El nuevo entorno contará con un espacio de oficinas y con la torre más alta de España, de 70 alturaslarazon

La aprobación definitiva de Madrid Nuevo Norte se retrasa al Pleno de febrero o incluso al de marzo. Una dilación que responde a la inmensa cantidad de alegaciones que este proyecto urbanístico ha recibido: más de 3.200. Así lo reconoció ayer José Manuel Calvo, concejal delegado de Urbanismo, durante la comisión de Desarrollo Urbano Sostenible. Calvo ha respondido así a una pregunta planteada por Paloma García Romero, edil del PP, sobre si el Ayuntamiento pensaba aprobar el proyecto este mes de enero.

Madrid Nuevo Norte, nombre que recibió la antigua Operación Chamartín, pretende una gran conexión norte-sur entre las estaciones de Atocha y Chamartín y que ésta enlace con otros medios de transporte. La propuesta actual reduce la edificabilidad total permitida en el ámbito, que será de 2.657.313 m2 frente a los 3.370.000 del plan anterior, lo que supone una reducción de 713.631 m2, un 21% menos.

El uso residencial suma 1.050.000 m2, de los cuales 790.000 se situarán al norte de la M-30, junto con actividades económicas comerciales y de servicios terciarios, mientras que el uso terciario de oficinas –muy vinculado a la propia estación de Chamartín–, se situará al sur de la M-30 manteniendo un 20% de uso residencial que resolverá la transición con los barrios del entorno. En total, se prevé la construcción de 10.500 viviendas, mientras que el espacio de oficinas contará con la torre más alta de España: 70 alturas.

Asociaciones de vecinos que han recurrido el proyecto manifestaron a LA RAZÓN sus dudas sobre la posibilidad de que pueda llegar a aprobarse en esta legislatura debido precisamente al gran número de alegaciones. Entre ellas, presentadas mayoritariamente por Ecologistas en Acción, la Plataforma Zona Norte, la Fravm (Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid) y el Instituto para la Democracia y el Municipalismo, destacan las que se refieren a incompatibilidades en la documentación del proyecto y que deben implicar la suspensión del proceso de aprobación en Pleno.