Política

Contaminación

La batalla contra la polución por ozono

La Comunidad ha superado este año las exigencias de calidad del aire salvo en este contaminante

En enero entrará en funcionamiento una estación de medición en el Puerto de Cotos / Foto: Luis Díaz
En enero entrará en funcionamiento una estación de medición en el Puerto de Cotos / Foto: Luis Díazlarazon

La Comunidad ha superado este año las exigencias de calidad del aire salvo en este contaminante.

En 2018, la Comunidad de Madrid ha cumplido con las exigencias de la Comisión Europea de Calidad del Aire en todos los contaminantes regulados salvo en el ozono, que ayer mismo daba lecturas muy por encima de los umbrales de aviso en la estación de la red regional de Collado Villalba. Al igual que ocurre con el Ayuntamiento de Madrid, la Comisión Europea también abrió un procedimiento de infracción contra la Comunidad en 2010 por no cumplir con las exigencias de polución, otorgándole una prórroga hasta 2014. En 2013, gracias a las medidas aplicadas por el Gobierno regional en el Plan Azul+ de Calidad del Aire se cumplieron todos los objetivos marcados y se archivó el expediente de infracción.

Sin embargo, el ozono no está respondiendo a las medidas que desde la Comisión Europea se están aplicando para controlar que sus concentraciones perjudiquen a la población. Es por ello que la Consejería de Medio Ambiente, en colaboración con la Comisión Europea y el Ministerio de Transición Ecológica, está trabajando para averiguar como reducir eficazmente la contaminación por ozono. En 2016 se puso en marcha el estudio «Análisis mediante campañas de medición adicionales y técnicas complementarias de modelización de la contaminación por ozono troposférico en la Comunidad de Madrid», que ha logrado identificar cuatro procesos que contribuyen al incremento de los niveles de ozono: la formación fotoquímica, los aportes externos de otras regiones, la fumigación desde altura y los aportes del penacho urbano de la capital.

Es por ello que la Consejería de Medio Ambiente comienza 2019 con nuevos avances en el control del ozono que parten de la inauguración de una nueva estación de medición en el Parque Regional de la Sierra de Guadarrama, en el Puerto de Cotos, para obtener datos sobre el ozono en zonas alejadas de los principales emisores. También se va a comprobar cómo afecta la meteorología, al igual que sucede con las concentraciones de dióxido de nitrógeno que, en situación de anticiclón en los meses frío hacen saltar las alertas de contaminación en la capital, de modo que, al igual que sucede en Madrid, se puedan anticipar la condiciones que favorecen los avisos por ozono.