Una plaza del centro de Madrid, convertida en playa por unas horas

Bajo un sol de justicia, esta mañana, todos los ciudadanos que paseaban por el centro de Madrid han sido sorprendidos con una escena muy poco habitual: un oasis congelado sobre una playa de arena real con más de 60 esculturas de hielo.

Las esculturas han permanecido intactas durante dos horas y media aproximadamente, lo cual parecía imposible por las acaloradas temperaturas que se superaban hoy en la capital, por encima de los 30 grados. Desde hamacas de hielo donde los 'más tolerantes al frío' se han atrevido a tumbarse, pasando por palmeras, gafas de sol, sombreros, y hasta un chiringuito playero han sido algunos de los elementos clásicos del verano que han estado congelados y presentes en la 'Plaza Parrot Bay', creada por un día sobre la plaza de Santa María Soledad Torres Acosta (más conocida como plaza de los Cines Luna) para acercar toda la frescura caribeña y la 'desconexión' que se siente al pisar la arena de playa.

¿El motivo de que este oasis haya amanecido hoy en Madrid? Alicia García, directora europea de innovación del grupo Diageo, ha señalado: "Con el verano ya bien adentrado nos hemos dado cuenta de la cantidad de ciudadanos que este año no han podido ir a la playa de vacaciones. Por eso les hemos querido traer un trocito de playa en forma de hielo, para que se refresquen por una mañana y puedan relajarse tomando un cóctel granizado en una tumbona de hielo al más puro estilo caribeño."

Un total de 68 esculturas han creado la 'Plaza Parrot Bay' y han sido elaboradas por la empresa líder en arte sobre hielo en Europa. "Crear este oasis congelado ha sido posible gracias a un sistema innovador en España. Primero hemos creado bloques de hielo a los que hemos extraído el aire en el momento de la producción para que el deshielo sea más lento y así conseguir que las esculturas duren más tiempo sin derretirse. Más tarde, los artistas escultores son los encargados de tallar las figuras para darles volumen en cámaras a ocho grados bajo cero", ha señalado Luís Mataix Sans, uno de los escultores.

Sin duda, la escultura más llamativa de la mañana ha sido la que ha realizado en directo el equipo de artistas escultores del hielo con una moto sierra: un loro de grandes dimensiones que ha sido el epicentro de la plaza madrileña, abarrotada de curiosos que miraban sorprendidos a estas estatuas de hielo en pleno verano.

Esta original iniciativa la ha puesto en marcha Parrot Bay, una nueva marca de cócteles granizados listos para servir.