Lotería de Navidad
Qué son las participaciones en la Lotería de Navidad
Ya sea que compartamos el premio con conocidos o con desconocidos, es importante que tomemos las debidas precauciones, para evitar así cualquier malentendido
Hay varios motivos por los que podríamos comprar boletos de la Lotería de Navidad en grupo. Puede ser porque es un hábito que han adquirido los compañeros de una empresa, o tal vez porque se pretende aumentar las probabilidades de ganar comprando más números… o también puede ser que el objetivo sea simplemente compartir la fortuna con algún ser querido. En cualquiera de los casos, es importante que nos aseguramos de que, si toca el premio, este va a ir a parar a quien se había acordado.
¿Qué son las participaciones?
Las participaciones son un contrato entre dos partes. El comprador invierte una pequeña cantidad en uno o varios números que, en caso de coincidir con el número ganador, otorgará a su dueño una pequeña porción del premio. El responsable de hacer el reparto del premio será quien tenga el décimo en su poder y de acuerdo con las condiciones que las personas que lo comparten acordaron previamente.
Ya sea que compartamos los boletos con amigos, con compañeros de trabajo o con alguna organización, es importante que nos aseguremos de que hemos tomado todas las precauciones necesarias y de que la participación que tenemos en las manos cumple con todos los requisitos formales. Esto nos ayudará a evitar sorpresas y malentendidos al repartir un posible premio.
Compartir con amigos
Tristemente, las personas no se comportan de la misma forma cuando las posibilidades de ganar son de 1 entre 100.000, que cuando el premio ya ha tocado. Y es posible que aquel amigo del alma con el que compartías tu suerte, cambie de parecer cuando entienda que el décimo ganador que tiene en su poder es, en realidad, un documento al portador... y que por tanto, lo recibe quien lo guarda.
No es descabellado entonces, que aquel premio que antes iba a ser compartido, ahora resulte que quienes van a compartirlo sean su bolsillo izquierdo y su bolsillo derecho. Tristemente, esto es más común de lo que nos pudiéramos imaginar. Por eso, es importante que tomemos algunas precauciones... aun cuando tengamos absoluta confianza con la persona con la que compartamos el premio.
La mejor precaución que podemos tomar para evitar cualquier “malentendido” es dejarlo todo por escrito. Para hacer esto, basta con que el depositario del décimo lo fotocopie, y entregue a cada “socio” una copia impresa que contenga la firma del portador, acompañada de su nombre, su DNI, y los detalles del reparto. No basta con un simple Whatsapp o e-mail porque, en caso de conflicto, la otra parte puede alegar que se ha manipulado la imagen.
Entonces, en caso de querer -o tener- que hacer esta gestión de forma telemática, lo más recomendable es reunir en un sólo documento los datos de todos los partícipes del grupo, así como la serie, el número y el año del décimo que se juega.
¿Y si no somos amigos?
También puede suceder que quien haga la partición del décimo no sea en grupo de amigos o de compañeros de trabajo, sino que sea una organización sin ánimo de lucro, que vende participaciones para recaudar fondos, o un bar que vende participaciones como un servicio adicional que ofrecer a sus clientes, etc.En estos casos, la relación entre el comprador del décimo y el comprador de la participación no tiene por qué ser de carácter personal, por lo que las necesidades de dejarlo todo claramente por escrito son mucho más apremiantes.
Así que, si quieres evitar cualquier problema durante el reparto del premio, es importante que te asegures de que la participación incluye los siguientes datos en su diseño:
1. El boleto debe indicar el sorteo y la fecha en la que se va a participar. En este caso, debe indicar que es la participación de un décimo del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad, que se celebrará el 22 de diciembre del año 2023.
2. La participación debe indicar claramente el número del décimo, el importe total con el que se juega y las donaciones adicionales reservadas para las organizaciones benéficas correspondientes, en el caso de una asociación.
3. También se debe indicar el nombre de la empresa o nombre completo de la persona que vende las participaciones, así como el DNI y la dirección postal, porque si el boleto resulta premiado, será a esa persona a quién se dirigirán. En ningún caso se puede reclamar a la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado (SELAE), pues ella no ha sido parte en ningún contrato.
4. La papeleta debe indicar que el 20% de los primeros premios irá al Ministerio de Hacienda. Loterías y Apuestas del Estado recomienda incluir este aviso para evitar reclamaciones. Si no hay ninguna indicación en la papeleta, cualquier ganador podría exigir al organizador el cobro del premio en su totalidad.
5. Si las participaciones las pone en circulación una empresa, un bar, o una ONG (por ejemplo), es recomendable que se muestre una fotocopia de la participación en la puerta o tablón de anuncios de la empresa o asociación que emite las papeletas. Esto evita la posible venta de falsificaciones. Cuanta más gente conozca el número y el diseño, menos posibilidades existirán de difundir boletos falsos.
En caso de que surja esta situación conflictiva, y el depositario del boleto haga oídos sordos a tus reclamaciones, hay que hacer dos cosas: primero, denunciar la apropiación indebida ante la Policía Nacional o ante la Guardia Civil; y segundo, comunicarlo ante Loterías y Apuestas del Estado. Con esta reclamación, el organismo público tendrá el poder de paralizar el pago, hasta que un juez determine finalmente quién o quiénes son los dueños legítimos... y qué parte le corresponde a cada cual.
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