Tenerife se suma a la carrera mundial del despliegue de cables submarinos

En un mundo donde damos por sentada la comunicación instantánea a través de smartphones y ordenadores, los cables submarinos no se ven, pero existen. Ubicados en las profundidades de los océanos, son los responsables del 98% de las telecomunicaciones intercontinentales del planeta y la columna vertebral que permite que las comunicaciones internacionales fluyan a velocidades asombrosas. El despliegue y el mantenimiento de estas autopistas de información es estratégico para garantizar la capacidad de absorber la demanda creciente de capacidad de datos.

En Canarias, Canalink, empresa de la matriz del Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER), dependiente del Cabildo de Tenerife es, desde 2011, propietaria de un sistema de cables submarinos de fibra óptica que une las Islas Canarias con la Península Ibérica y con la costa occidental de África.

Además, tiene convenios de intercambio con otros operadores y participa en consorcios de cables submarinos con el objetivo de interconectar Europa con África y convertir a Tenerife, y más concretamente al centro de procesado de datos D-Alix, en un centro de intercambio masivo de tráfico neutral. “Este sistema de intercambio neutro ofrece sus servicios a empresas y administraciones públicas y actúa como eje para entender y hacer funcionar esta estructura”, explica el responsable de Innovación del Cabildo de Tenerife.

Un nuevo sistema de cables submarinos transforma el paisaje digital de Canarias

En un momento estratégico para el sector de los cables submarinos, Canalink ha logrado obtener financiación europea para el despliegue de un sistema de cables de fibra óptica entre Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote. De la inversión necesaria prevista, de 34 millones de euros, la Comisión ha concedido a CanaLink 23,4 millones a través de los fondos “Connecting Europe Facility (CEF)” de la Unión Europea. Por su parte, el Cabildo de Tenerife, por medio de Canalink, aportará otros 11 millones de euros.

Según explica Carlos Suárez Rodríguez, consejero delegado de Canalink, “Este proyecto es un nuevo hito en el objetivo de potenciar la digitalización y el sector tecnológico en Canarias y es un paso esencial para multiplicar la capacidad de conexión de las islas no capitalinas del Archipiélago y favorecer la inversión en las islas como plataformas tecnológicas al mundo”.

Se trata de un proyecto histórico en el ámbito de las telecomunicaciones en este archipiélago y un ejemplo del potencial de este tipo de infraestructuras que deben adaptarse al incremento del tráfico de datos. Permitirá a las islas estar mejor conectadas y disponer de las últimas capacidades en materia de telecomunicaciones. “Contamos con un equipo humano donde el talento y la formación se cruzan para dar como resultado una estructura con un gran potencial y desarrollo, con capacidad de seguir creciendo y de afianzar este sector más allá de Canarias”, señala el consejero de Innovación del Cabildo de Tenerife, Juan José Martínez.

“El proyecto Canalink persigue convertir a la isla de Tenerife en una plataforma referente para el tránsito de información digital entre Europa y África, en un sector en auge donde Canarias puede aportar talento y capacidad tecnológica. Tenerife consigue con este nuevo proyecto afianzar su apuesta por conectar Canarias con el mundo desde el punto de vista digital y de las telecomunicaciones”, añade Carlos Suárez Rodríguez.

Es el tercer “salto” de un proyecto que se inició en 2011, con las primeras conexiones entre Tenerife, Gran Canaria, La Palma, Cádiz y Marruecos. El segundo “salto” consistió en interconectarse al sistema ACE (Africa Cost to Europe), un cable internacional que recorre toda la costa occidental de África hasta Francia, que permitió a Canalink expandirse internacionalmente y comenzar a vender servicios de internet a operadores del continente africano. Ahora, con financiación europea se unirán al sistema de Canalink también Fuerteventura y Lanzarote, por medio de un anillo de conexiones bidireccionales. Gracias a este sistema redundado, el servicio se mantendrá inalterado ante cualquier problema técnico que afecte a uno de los cables.

La finalización del despliegue está prevista para 2026 y la vida útil estimada de estas autopistas submarinas es superior a veinticinco años. Su instalación y mantenimiento es también fuente de empleo especializado y la oportunidad de convertir a la isla de Tenerife en una plataforma estratégica a nivel internacional para el sector en auge del cable submarino.

 Canalink presta en la actualidad servicios a empresas como Vodafone, MásMóvil, Orange, Lyntia o el operador público Red.es para su red de investigación RedIRIS, así como también a operadores de telecomunicaciones africanos tales como Mattel y Mauritel, en Mauritania, o Maroc Telecom, la más importante de Marruecos.

Raquel Quintana