Opinión

Imaginaos que Sánchez presidiera Madrid

Los españoles nos hemos quitado la venda de los ojos y vemos la luz al final de este túnel. Y esa luz es la que arrojan políticos de Estado como Alberto Núñez Feijóo, Ayuso o Juanma Moreno

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz AyusoEUROPA PRESS/J. Hellín. POOLEuropa Press

Parece que la mentira se ha instalado definitivamente en la vida pública española. Bueno, en la vida pública de un político que, para desgracia de todos, gobierna nuestro país con aires totalitarios, ajeno a la realidad y absorto e imbuido solo en su propia carrera post Moncloa, o eso dicen.

Sea como fuere, Pedro Sánchez representa la mentira. Una mentira que erosiona a los políticos porque de ella solo se desprende la falta de ejemplaridad para con los ciudadanos. Y, al final, y lo entiendo, la inmensa mayoría pensáis que todos los políticos somos iguales. Y eso no es cierto. No lo es.

Imaginaos si todos fuésemos como Pedro Sánchez, imaginaos el sanchismo campando a sus anchas por todos nuestros territorios, pueblos, ciudades. Imaginaos a Sánchez al frente de las comunidades autónomas, verdaderas gestoras de la pandemia del COVID. De verdad, imaginaos a Pedro Sánchez siendo alcalde de un pequeño municipio o una gran ciudad, imaginaos a Sánchez al frente de la Comunidad de Madrid.

¿Podéis imaginarlo? Casi me produce escalofríos pensar que un político de su catadura moral en la que pacta con defensores de asesinos para mantenerse en el poder, una persona que decide «olvidar» los crímenes de los terroristas asesinos de ETA porque «eso sucedió hace diez años». Alguien que se apoya en el comunismo más casposo y, por cierto, condenado por Europa, y que es capaz de estrechar la mano a aquellos que odian al país que Pedro Sánchez representa. Nuestro país. No casi, me produce ciertamente, un gran escalofrío.

Y leo las palabras del presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, en una entrevista «vaselina» en la que se victimiza (eso ya no te lo compra nadie, Pedro) y pregona que los «poderes oscuros» conspiran contra él y su Gobierno. «Señores que fuman puros y controlan poderosas terminales económicas y mediáticas» (creo que el señor Sánchez está confundiendo la realidad, una vez más, o la pervierte a su antojo pensando que los españoles somos tontos de remate).

Y continuó. Ya tenemos conspiración y victimismo. Y llegó Zapatero. Apoyando y refutando las creíbles palabras de Pedro Sánchez, contra esos «poderes visibles e invisibles» contra la sobresaliente gestión (son palabras de Zapatero, no mías).

Y por si teníamos dudas de qué parte está cada poderoso mediático, el gran titular del domingo de un respetado medio de comunicación dispara a favor del señor Sánchez y falsea la realidad (¿podría considerarse esto manipulación de un gran medio?): «Vamos a hacer fijos a 67.000 sanitarios en España».

¿Quién los va a hacer fijos, Sánchez? Miente. Pervierte el sistema. Y necesita a los colaboradores necesarios para difundir una mentira. Así de simple.

Porque son las comunidades autónomas quienes harán fijos a los sanitarios. Ellas. En Madrid, la presidenta Isabel Díaz Ayuso. Y para muestra un botón: el 25 de mayo, mes y medio antes de este «anuncio» (fake) de estabilización del señor Sánchez, la Comunidad de Madrid aprobó la convocatoria de estabilización para casi 10.000 plazas en el ámbito sanitario.

La pregunta es obligada. ¿Por qué miente tanto Sánchez? Claro que hay oscuridad en la vida política actual. Hay demasiada opacidad o negrura, y Sánchez espera que los españoles crucemos este túnel con los ojos vendados. Pero se equivoca.

Los españoles nos hemos quitado la venda de los ojos y vemos la luz al final de este túnel. Y esa luz es la que arrojan políticos de Estado como Alberto Núñez Feijóo, Ayuso o Juanma Moreno.

Porque los únicos «poderes» que están relegando la política autoritaria e ineficaz de Pedro Sánchez es el poder de la democracia. Los votos. Los españoles.

Y ya sabe Sánchez que su tiempo ha terminado. Señor presidente, disfrute de la imagen capturada en Nueva York. Esa ministra comunista y sus tres acompañantes, financiado con el dinero de todos los españoles. Porque esa es la foto «guay» de los poderes que usted quiere en nuestro país. Un comunismo que reparte miseria entre todos y privilegios y viajes, entre ellos pocos.

Disfrute lo que pueda, que pronto los españoles, democráticamente, le mostraremos la puerta de salida.

Yolanda Estrada es diputada del Partido Popular en la Asamblea de Madrid