Madrid: descienden en general los delitos contra el medio ambiente pero se duplican los de maltrato animal

A lo largo del pasado año, la Comunidad de Madrid investigó un total de 124 causas penales relacionadas con delitos contra el medio ambiente. Una cifra que supone una reducción del 17,8% respecto al año anterior, cuando se registraron 151. Un número que, según el Cuerpo de Agentes Forestales, tiende a la “estabilización”, afirmaron esta mañana durante la presentación del balance de estos delitos en la región.

El 45% de los delitos están relacionados con flora y fauna, el 20% con incendios forestales y un 27% corresponden a delitos de Urbanismo. En líneas generales, una zona ha sido especialmente intensa: el Parque Nacional del Río Guadarrama, seguido del Parque Regional del sureste.

En lo que respecta a los delitos contra flora y fauna, de acuerdo a los agentes forestales, se incluyen los disparos a especies protegidas (como ocurre en el caso del lobo), el uso de artes ilegales de caza como cepos, lazos, o jaulas trampa, así como el empleo de venenos. Desde un prisma geográfico, estos delitos contra la fauna se centran más en el este y el sur de Madrid.

En cuanto a los incendios forestales, se ha producido un descenso con respecto a 2021. Un delito que se focaliza más en el oeste de la región, al igual que años anteriores. “Todos los incendios forestales ocurridos el año pasado han sido investigados en su totalidad. Conocer sus causas es la mejor manera de actuar contra ellas de cara al futuro y poder mejorar así la política de prevención”, señaló Enrique López, consejero de Presidencia, Justicia e Interior del Gobierno autonómico. Por último, los delitos de Urbanismo, que se centran sobre todo en aquellas obras que atentan contra medio ambiente, estuvieron repartidos por todo el territorio.

En lo que respecta a los delitos por maltrato animal, si bien su número es muy bajo (apenas el 4% del total de los cometidos), los agentes afirman que se han duplicado con respecto al año pasado. “La sensibilidad ciudadana ha provocado que nos lleguen muchísimas denuncias”, asegura Miguel Higueras, jefe del operativo de Agentes Forestales. El maltrato no se refiere solo a perros, también a caballos, y suele corresponderse con falta de alimento y agua para los animales, añade.

Según explican desde el Ejecutivo autonómico, los agentes participaron el año pasado en el dispositivo de inspección de balsas y canales para valorar la incidencia de los ahogamientos de la fauna silvestre, así como la inspección y valoración de puntos de alto riesgo de incendio forestal. Para ello, conjugan el empleo de técnicas y métodos (inspección técnico ocular, método de evidencias físicas, formación técnica avanzada) y de herramientas (unidad canina especializada en persecución de venenos, maletín de investigación de incendios forestales, cámaras de foto trampeo, etc..), junto a los conocimientos legales para su aplicación, constituyéndose en una policía judicial altamente especializada.