Madrid

Oposiciones «irregulares» para taquillera de la piscina de Pinto

Anulan el examen tras detectar que la única que aprobó era novia de uno de sus responsables

Piscina Municipal de Pinto
Piscina Municipal de PintoJesús G. FeriaLa Razon

En la piscina municipal de Pinto hay malestar e indignación entre los trabajadores. Todo vienes desde que el Ayuntamiento de la localidad, a través de su empresa municipal de servicios Aserpinto, convocara unas oposiciones para auxiliar de servicios el 31 de mayo de 2022. Se trataba de consolidar el empleo temporal de tres monitores/socorristas, dos taquilleros y un peón/operario.

Seis meses después de publicarse la convocatoria en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid se publicaron los procesos selectivos, a los que se presentaron 27 aspirantes. Pero ya el mismo día del examen de taquillero empezaron a levantarse sospechas sobre el proceso. «Entró una chica tapándose la cara con el pelo y tratando de disimular que no conocía a las dos personas que formaban parte del tribunal de oposiciones, aunque se encontraban en la sala. Eran los responsables de la piscina. No les habló en ningún momento y trató de evitar cruzar la mirada con ellos, pero todos sabíamos que era la novia de uno de ellos. Fue la primera en salir del examen, pese a que todo el mundo se quejaba de que había sido muy rebuscado, pero luego vimos que mientras personas con una preparación superior a las exigencias que se requerían para el puesto habían suspendido, ella había sacado un 10», relata una trabajadora de Aserpinto que prefiere mantener el anonimato para evitar posibles represalias.

Preguntas rebuscadas

Los mismos empleados se preguntan cómo era posible que la joven, sin experiencia anterior en la piscina, fuera capaz de responder a preguntas que ni un taquillero que lleva años vendiendo entradas en las instalaciones podría acertar. «Se preguntaban cosas como la tarifa que se debería aplicar a una persona con discapacitada que acude a la piscina si, además, no es de Pinto. Normalmente el precio, en estas circunstancias, te lo da el propio sistema, no es algo que te sepas de memoria. Pero esta chica acertó preguntas de este tipo, por lo que pensamos que previamente le habrían podido pasar el examen», relata la trabajadora municipal con indignación.

Poco después, la sección sindical de UGT Aserpinto trasladó al Ayuntamiento su malestar con el proceso de selección. En un comunicado fechado el pasado 17 de enero, informaba de que había trasladado su disconformidad con el desarrollo del proceso de oposiciones. «Hemos solicitado que se anule y se realice de nuevo, cumpliendo todas las premisas de objetividad e imparcialidad, garantizando la igualdad de oportunidades a todos los aspirantes. Por todo ello, esperamos ahora que la dirección de la empresa adopte una decisión razonable sobre lo ocurrido», exponía.

El mismo sindicato ha confirmado a LA RAZÓN que la petición de anulación del proceso se hizo «al detectar irregularidades y después de que nos dijeran que la persona que había aprobado para la plaza de taquillera tuviera relación con un responsable de la piscina. Hay un expediente disciplinario abierto, el proceso se ha anulado y, ahora, el asunto se encuentra en proceso de investigación», explica la asesora jurídica del sindicato.