¿Lo va a hacer Rita o Reyes? Así será la batalla en Madrid de las candidatas de la izquierda

«En la carrera por la Alcaldía de Madrid tenemos a dos candidatas que son la antítesis de Almeida: por un lado, él, hombre de derechas; por otro, dos mujeres de izquierdas que tienen por delante la labor de diferenciarse entre ellas con propuestas muy claras, ya que se disputan una parte del electorado». Así explica a LA RAZÓN el consultor político y profesor de la Universidad Camilo José Cela, Eduardo González Vega, el panorama del cual parten las propuestas de la izquierda para arrebatar la silla al alcalde José Luis Martínez Almeida en el Ayuntamiento de la capital. Y es que, si bien Rita Maestre (Más Madrid) ya copaba titulares durante la última semana con su campaña «Lo va a hacer Rita», la candidata del PSOE, Reyes Maroto (actual ministra de Industria, Comercio y Turismo), presenta formalmente hoy junto a Pedro Sánchez su candidatura en la Nave Boetticher de Villaverde.

«Que Maroto venga de un cargo del Gobierno hace que tenga este trampolín de cara a que cualquier cosa que haga vaya a tener más apoyo mediático», continúa González. De hecho, este reconocimiento puede ser fundamental para su candidatura porque, aunque sea ministra, «no tiene un perfil muy reconocible en la capital». Se enfrenta, así, a una Maestre que «tiene el trabajo ya hecho», pues lleva mucho tiempo en el Ayuntamiento de Madrid.

«Además la idea de ‘Lo va a hacer Rita’ le ha ayudado mucho a posicionar su mensaje», asegura el experto. De hecho, es innegable que, durante unos días, el lema de la campaña ha suscitado infinitas reacciones. «Cuando te entran a criticar con este tipo de cosas es porque está teniendo el efecto que tú buscabas», añade González. Coincide con él Manuel Rodríguez, experto en comunicación política y fundador de Cámara Cívica, quien señala que el hecho de que Maestre haya conseguido que se hable de ella, «aunque sea para mal», es síntoma de que Más Madrid no solo «ha sabido marcar el paso con una campaña simpática y original» sino que el PP de Almeida identifica a este partido «como el principal adversario a batir».

«Maestre ha tenido cuatro años para construirse un perfil», dice Rodríguez, «y lo ha hecho estando muy centrada en Madrid, liderando la oposición en momentos muy difíciles y generando un tipo de liderazgo asertivo y dialogante». La candidata socialista, sin embargo, «tiene tan solo unos meses» para posicionarse. «Poner un tuit en el que dices que has visitado todos los barrios de Madrid está muy bien, pero no es tan efectivo como visitarlos durante cuatro años», apunta, ya que «en la política local es muy importante tejer relaciones con los vecinos, con los comerciantes, que la gente perciba que conoces los problemas… y al venir de ser ministra hace que vaya a ser más complicado».

Ambas tienen, además, perfiles diferentes. «Los votantes no las conocen personalmente, así que lo que importa es la percepción que se tiene de ellas», señala González. En este sentido, «Maroto tiene una imagen más seria y de gestión, basada en la experiencia que le da estar en el Gobierno, mientras que Maestre juega más al aire nuevo, a la nueva izquierda que hay en Madrid y que está por encima del PSOE, algo que sigue la misma línea que ya les funcionó en las elecciones anteriores». El experto reconoce, incluso, que Maestre podría tener una imagen más cercana, «pero esto tiene más que ver con el perfil del electorado», ya que «ambos partidos hacen sus estudios y saben con qué perfil de votante pueden o necesitan conectar más». Asimismo, González recuerda que a Reyes Maroto le va a pesar «el problema del PSOE en Madrid», ya que este partido acumula, históricamente, un mal resultado electoral en la capital, y eso «no se cambia en cuatro meses de campaña».

Para Pablo Simón, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Carlos III de Madrid, Maestre, además de tener una mayor experiencia en la actividad política que se lleva a cabo en el Ayuntamiento de Madrid, «está protegida» por su propia marca. «Más Madrid no está en el Gobierno de España, mientras que el PSOE sí», dice. Por su parte, «Maroto se encuentra también entre ese voto de castigo o de aprobación al Ejecutivo. Si quieres castigar a Sánchez, es menos probable que votes a Maroto que a Maestre, cuya formación no está en el Gobierno», explica. Además, considera que la candidata de Más Madrid ha acertado a la hora de establecer su estrategia: «En una de las pocas entrevistas que ha dado hasta ahora Maroto, ha lanzado el titular de que Almeida y Ayuso están alineados, intentando así acaparar el voto anti Ayuso en Madrid», señala.

Sin embargo, la estrategia de Maestre consiste en lo contrario: «Está centrándose en Almeida, porque tiene la expectativa, fundamentada, de que Ayuso es una marca más fuerte que el actual alcalde de Madrid, y le interesa desligarlas», explica. Esto, señala, tiene su origen en algo que «muchas veces ha ocurrido en Madrid, y es que la gente coge papeletas diferentes a la hora de votar a la Comunidad y al Ayuntamiento. Entonces, puede ocurrir que un votante popular vote a Ayuso en la Comunidad, pero en el Ayuntamiento no vote al PP. Y, aunque no te vote necesariamente a ti, a lo mejor se abstiene, y eso te puede beneficiar».

Por otro lado, uno de los puntos que, para los expertos, hace más patente la diferencia entre las candidatas es la respuesta que cada una de ellas ha tenido a la sátira que el programa Polònia de la catalana TV3 hizo a partir de la campaña turística de la Comunidad de Madrid y ante el que Reyes Maroto respondió con un «simplemente geniales» en Twitter. «Esta es una de las cosas en las que se demuestra si eres una marca local», señala Simón. «Los que te votan son los madrileños, y hay un instinto muy primario en el que yo puedo estar en desacuerdo con la gestión, pero no voy a tolerar que vengas de Cataluña a ridiculizarme», explica. Esto, para Simón, se vincula además con un aspecto clave de Más Madrid en la pasada campaña: «Sabían que aquello de ‘alerta antifascista’ no tenía mucho sentido, y lo que se hizo fue adoptar una postura propositiva», recuerda. «Con el caso del vídeo pasa lo mismo: no voy a alabar un vídeo que dice que Madrid es lo peor, sino que sé que Madrid tiene problemas y estas son mis propuestas».

En la misma línea, Rodríguez señala que, desde su designación como candidata socialista a la Alcaldía de Madrid en noviembre, Maroto ha compatibilizado las visitas a barrios de Madrid con viajes oficiales a otros países, como Marruecos, Corea o Eslovaquia, en calidad de ministra. «Esto es muy difícil y su equipo lo sabe», apunta, si bien reconoce como positivo que Maroto, siempre que ha llevado a cabo estas visitas a los barrios madrileños lo ha hecho «rodeada de personas conocidas en Madrid, como el urbanista José María Ezquiaga o Luis García Montero». Asimismo, Rodríguez detecta que la estrategia de Maroto es vincular lo conseguido por el Gobierno de Sánchez a su propuesta para el futuro de Madrid, «de ahí que hable mucho de remodelar la administración pública madrileña para mejorar las políticas de empleo o de movilidad». Precisamente en el ámbito de la movilidad se ha logrado vislumbrar una propuesta en común entre dos candidaturas tan diferentes, ya que tanto Maestre como Maroto se han comprometido a soterrar la A5 en el distrito de Latina.

«Lo más importante es que las dos representan la idea del cambio», asegura González. Y es que, en definitiva, el ciudadano al acercarse a las urnas «tiene que plantearse si quiere continuidad o si quiere cambio en Madrid. Si quiere cambio, tiene que decidir entre una de las dos, y esta campaña electoral va a tener que fijarse ese objetivo: el posicionarse como la baza del cambio en Madrid», explica. «Ambas van a trabajar en la idea de un Madrid diferente», coincide Rodríguez. «La cuestión ahora es si ese modelo de ciudad está sostenido con análisis y, sobre todo, con un relato, porque el relato del Madrid de la libertad de Ayuso ha calado, pues representa un estilo de vida», añade. Y, frente a eso, la pregunta ahora es si alguna de ellas encabezará ese «otro modelo» de Madrid.