Sucesos

Verano de cuchillos largos en Madrid: más de veinte heridos en mes y medio

La capital ha sido noticia por más de media docena de agresiones en los que el denominador común han sido el uso de armas

Reyerta en Tirso de Molina, Madrid, con un herido
Efectivos sanitarios atienden a un hombre acuchillado en Tirso de MolinaDavid JarLa Razón

Reyertas, venganzas, ajustes de cuentas... o celos, como ocurrió en el suceso registrado ayer. En los menos de dos meses que llevamos de verano, la capital ha sido noticia por más de media docena de agresiones en los que el denominador común han sido el uso de armas. Sobre todo blancas, pero también de fuego. El parte resulta aterrador: casi una veintena de heridos, varios de ellos de gravedad.

Los últimos once de ellos se produjeron en la madrugada de ayer martes, en la zona de Marqués de Vadillo (Carabanchel). Concretamente, nueve hombres y dos mujeres, que presentaban cartas en cara, brazos y piernas. Eran las seis de la mañana cuando, en los alrededores de una concurrida discoteca del distrito, comenzó una discusión entre un grupo de jóvenes de entre 20 y 30 años de origen sudamericano, informa Europa Press. La reyerta se prolongó hasta la plaza de Marqués de Vadillo, donde los jóvenes empezaron agredirse con botellas. Por el momento, las hipótesis se centran más en una pelea por celos que en una asunto relacionado con las bandas latinas. Con todo, la Policía Nacional no descarta ninguna conjetura.

El caso de Carabanchel se suma, cuando no solapa, a otros registrados en cuestión de unas horas. Un hombre de 55 años, en su caso en la plaza de Tirso de Molina, tuvo que ser atendido el pasado lunes por efectivos de SAMUR-Protección Civil tras recibir una puñalada en el cuello. La agresión se produjo cuando otro hombre le atacó con un cuchillo de cocina, lo que produjo un gran revuelo entre la que gente que se encontraba en el lugar de los hechos y que acabó desembocando en su detención. Afortunadamente, el estado de la víctima, trasladada al Hospital Clínico, no reviste gravedad.

Hace unos días, el pasado 3 de agosto, la Policía Nacional detuvo a tres jóvenes relacionados con el apuñalamiento de otro, de 23 años, en la plaza de Legazpi. Un suceso, este sí, que parece relacionado con las bandas latinas. Veinticuatro horas antes, en Puente de Vallecas, un hombre de 32 años, propietario de un local de kebabs, recibió una puñalada por parte de un cliente que le afectó al corazón y al pulmón. Del mismo modo, el pasado 22 de julio, un hombre de 30 años resultó herido de gravedad al ser acuchillado en la parte posterior del cuello en el madrileño distrito de San Blas-Canillejas.

Mientras, el 30 de julio, dos jóvenes resultaron heridos, uno de ellos de carácter grave, tras una agresión con una botella en las inmediaciones de la plaza del Dos de Mayo. La víctima, de 23 años, presentaba un corte en el cuello con posible afectación a la yugular y gran pérdida de sangre.

A estos casos hay que sumar dos más, a principios del verano. A finales de junio, un joven de 29 años fue apuñalado durante una reyerta en plena calle, en el barrio de Campamento. La causa de la agresión se encuentra en una deuda entre dos parejas y la posterior discusión. Por último, a mediados de julio, la Policía Nacional investigaba el ataque sufrido por el "Gordo Maya", miembro de la banda de "aluniceros" de "El Goyito". De 24 años, recibió un disparo en el distrito de Ciudad Lineal.

Desde el Ayuntamiento de Madrid, se ha requerido en numerosas ocasiones al Gobierno central la eliminación de la tasa de reposición que impide aumentar los efectivos de la Policía Municipal. El Cuerpo madrileño cuenta actualmente con 5.932 efectivos, lo que ha supuesto un incremento del 7,34 % de la plantilla. Sin embargo, el Consistorio considera esta cifra "insuficiente": la ciudad sufre un "déficit estructural" de al menos 1.000 policías, hasta llegar a la cifra ideal de 7.000 agentes. No en vano, se trata de uno de los puntos acordados por todos los grupos municipales de Cibeles en los Acuerdos de la Villa de 2020. Con todo, sobre éste y otros asuntos, se está a la espera de saber el color político que finalmente teñirá la Moncloa, dependiendo de si Núñez Feijóo o Pedro Sánchez logran formar una mayoría parlamentaria.

De hecho, una de las promesas electorales de Martínez-Almeida es el Plan Objetivo 10.000: el aumento, hasta esa cifra, de efectivos de Policía Municipal, Bomberos y SAMUR-Protección Civil, de modo que se puede alcanzar la "ratio recomendada por habitante". La intención del Consistorio es la de incrementar especialmente su presencia en los distritos que cuentan con nuevos desarrollos urbanísticos y que, por tanto, más están creciendo. Entre esos planes para la recién comenzada legislatura está también la elaboración de un plan estratégico de los servicios de seguridad y emergencias del Ayuntamiento que analice la situación, necesidades y propuestas de cada uno de los servicios, así como marcar los objetivos y medidas a implementar en cada uno de ellos.

En lo que se refiere a problemas concretos, las bandas juveniles son otra de las cuestiones a tratar. Cibeles planea una estrategia para combatirlas. Una iniciativa que contará con el asesoramiento de la Policía Municipal, en colaboración con los servicios sociales del Ayuntamiento de Madrid. Y es que parte de las actuaciones se centrarán en los entornos escolares en los que estas bandas buscan captar nuevos miembros.

Lo cierto es que en la ciudad de Madrid no sobran policías; más bien, faltan. Al menos, ese desprende del balance de criminalidad del Ministerio del Interior, perteneciente al año 2022. Los robos con violencia se incrementaron un 5,9% en la capital, mientras que los robos con fuerza en los domicilios experimentó una subida del 26%.

En todo caso, el delito más numeroso en la ciudad es el hurto: aquellos robos en los que no intermedia la violencia o la intimidación, con más de 90.000 casos en un año. Como en la inmensa mayoría de tipologías, se han registrado incrementos: un 25% más.

En cuanto a los homicidios dolosos y asesinatos, en Madrid se consumaron el pasado año 27 homicidios y asesinatos y se intentaron 83. Así, la capital experimentó un incremento del 50% en ese sentido.

Uno de los delitos que más alarma social conlleva, el de índole sexual, también ofreció cifras preocupantes. El referente a la libertad sexual se saldó con 1.443 casos en Madrid, lo que supuso un aumento del 16,8%. En cuanto a las agresiones sexuales con penetración, se produjeron 218 violaciones en Madrid, dando pie a una subida del 40%.