Mitsubishi Colt, una compra inteligente

Por encima del Space Star, el Colt es el modelo de entrada a la gama de Mitsubishi. La marca japonesa forma parte de la llamada Alianza, encabezada por Renault y a la que pertenecen asimismo Nissan y Dacia, y por tanto se beneficia de la tecnología de sus socios para el desarrollo de sus modelos. Gracias a ello encontramos innegables similitudes entre el Clio de Renault y este Colt de Mitsubishi, pero con la ventaja para el que lleva el escudo de los tres diamantes de que su precio de adquisición es más favorable. Y por ello es una compra más inteligente.

El nuevo Colt supone un cambio fundamental respecto a las seis anteriores generaciones de este mismo modelo y representa una ayuda inestimable para el negocio de los concesionarios de la marca en España. Porque cuenta además con la ventaja de que se fabrica en la factoría de Renault, lo que supone una ventaja indudable a la hora de la disponibilidad del vehículo sin esperas o de la recepción de piezas de repuesto. Va en la misma línea de colaboración entre Mitsubishi y Renault que ya pudimos ver hace aproximadamente un año, cuando llegó al mercado el ASX, asimismo derivado de la ingeniería de la marca del rombo, fabricado en la factoría de Palencia y que ha supuesto una buena operación para ambas marcas, en un caso desde el punto de vista comercial y en el otro, desde la perspectiva industrial. La oferta de la marca japonesa se completa con otros diseños de mayores dimensiones, como el Eclipse o el Outlander que, además, podrán equiparse con motores híbridos enchufables siguiendo las últimas tendencias del mercado.

El Colt es un cinco puertas del segmento B del cual, a lo largo de su historia, Mitsubishi ha vendido 1,2 millones de unidades en más de cuarenta años de trayectoria. Este nueva generación es muy compacta como lo acreditan sus 4,05 metros de largo y supone un arma comercial para competir en este disputado trozo del mercado en donde la competencia es especialmente fuerte, con modelos como Hyundai i20, Toyota Yaris, Peugeot 208 o Renault Clio. Este último, como hemos señalado, es la base del nuevo Colt, que se fabrica en la factoría de Bursa (Turquía). De esta forma, Mitsubishi pone en circulación un modelo similar con ventajas comerciales evidentes. Porque el nuevo Colt se vende con diferentes motorizaciones y tres terminaciones distintas: Motion, Kaiteki y Kaiteki+, con una tarifa de precios que se inicia en los 17.790 euros hasta llegar a los 28.990 de la versión híbrida más potente y de terminación superior.

En su estética, las coincidencias con su primo hermano el Clio son evidentes, si bien hay toques propios de su identidad, como el escudo central de los tres diamantes o las grandes letras Mitsubishi en la puerta del maletero. Al abrir esta nos encontramos con una capacidad de carga de 391 litros, ampliables hasta los 1.069 cuando abatimos los asientos posteriores. En el interior cabe destacar el empleo de materiales reciclables en todas las superficies y, puestos al volante multifunción, el conductor tiene ante su vista una pantalla de 10 pulgadas con todos los datos del funcionamiento mecánico y otra, en posición central del salpicadero, con las informaciones habituales y las conexiones completas a los sistemas Apple CarPlay y Android Auto. El conductor puede elegir entre tres tipos de conducción según busque menor consumo, uso normal o mayores prestaciones.

Por lo que respecta a la mecánica, se ofrecen varias alternativas. Desde un motor de gasolina atmosférico de tres cilindros y un 1,0 litros turboalimentado con caja de cambios de cinco marchas y que ofrece una potencia de 65 caballos, o este mismo bloque y caja manual de seis velocidades, que eleva su potencia hasta los 90 cv. Un paso superior sería elegir el sistema híbrido recargable (hev) que combina un motor de gasolina de cuatro cilindros y 1,6 litros y transmisión automática, con un motor eléctrico de 36 kW y una batería de 1,2 kWh., cuya potencia se eleva hasta los 145 caballos. Gracias a esta combinación, la autonomía llega hasta los 900 kilómetros ya que el consumo se sitúa solo ligeramente por encima de los cuatro litros.

Como todos los automóviles de última generación, el Colt dispone de todos los sistemas más avanzados de ayuda a la conducción y a la seguridad, como cámaras con visión de 360 grados, control de crucero adaptativo, monitor de visión periférica, luz automática de carretera, aviso de ángulo muerto, sistema de mitigación de colisiones frontales, aviso de salida de carril, asistente de mantenimiento de carril, asistente de aparcamiento, alerta de tráfico trasero o reconocimiento de señales de tráfico. El sistema permite aparcar sin manos en plazas perpendiculares, paralelas o en ángulo gracias a la información que aportan los sensores y la cámara trasera.