Tezanos y la furia del supermercado

José Félix Tezanos, presidente del CIS, criticado por las encuestas que anunciaban la victoria del PSOE y por cambiar la metodología, al final, sí se pasó de listo. Cuatro días antes de las elecciones comentó a unos amigos que el PP rondaría los «¡75 escaños!» No todos le creyeron. «¡Quién los pillara!», diría Pablo Casado. Hace meses, cuando el CIS publicó las primeras encuestas con el PSOE en cabeza, no solo fue denostado. Un día, en el supermercado, mientras el sociólogo hacía la compra, fue increpado e insultado con furia por otro cliente del establecimiento, que lo puso como chupa de dómine por esas encuestas.

La violencia, por fortuna, quedó en verbal, ante un Tezanos, atónito en aquel momento, y que ahora lo rememora incluso divertido. No consta, que el exaltado del supermecado haya pedido disculpas al presidente del CIS, después de que las urnas le dieran la razón. Tezanos ultima ahora la encuesta para las elecciones europeas, autonómicas y municipales. Esta vez, sus augurios serán más atendidos, aunque no son infalibles y, como él mismo ha explicado, fiarse de las encuestas ha provocado decisiones catastróficas, el Brexit, por ejemplo, tras el referéndum que convocó David Cameron confiado en sondeos que fallaron. Los comicios del 26-M llegan, en teoría, como la segunda vuelta de las generales, «o no», como diría Rajoy.

Casado se juega su futuro y Sánchez podría acumular más poder. Iván Redondo, el exitoso gurú electoral del líder socialista, siempre defendió celebrar las generales antes de las municipales. En España, desde 1931, cuando acabaron con la Monarquía de Alfonso XIII, las municipales son temidas. En 1979, por ejemplo, Suárez también colocó las generales antes de las municipales, no sin antes hablarlo con don Juan Carlos. Por si acaso.