Opinión

El bicho y la anomalía española

El bicho, Sars-Covid-19, está descontrolado otra vez y asola a un país perplejo, indisciplinado en las relaciones personales/familiares y atemorizado. La economía necesita respiradores, como los infectados graves del virus, y se anuncian años oscuros, con un empobrecimiento general inevitable. El gran misterio, sin embargo, sigue sin rebelarse, ¿por qué España sufre más los embates del bicho, por ejemplo, que otros países de Europa?

España es el país europeo con mayor porcentaje de territorio deshabitado y más concentración de población en ciertas zonas. Solo el 12,7% de sus 500.000 kilómetros cuadrados están habitados, mientras que la densidad llega a los 737 habitantes por kilómetro cuadrado en las áreas ocupadas, la mayor aglomeración de población de Europa, solo superada por Malta. Es la «anomalía» española en una perspectiva europea, según Eduardo Gutiérrez, Enrique Moral-Benito y Roberto Ramos, del Banco de España, y Daniel Oto-Peralias, de la Universidad Pablo de Olavide, en un sugerente Documento de Trabajo, recién publicado por la institución que gobierna Pablo Hernández de Cos.

La «anomalía» española no se explica por razones de una geografía y un clima adversos, según los autores de un estudio que abre vías inexploradas de investigación. Islandia, Finlandia, Noruega y Suecia son otras zonas de Europa con grandes áreas sin población, pero en esos lugares las condiciones geográficas y climáticas son determinantes y muy diferentes a las de Teruel, Zaragoza, Ciudad Real, Albacete, Sevilla y Asturias, provincias en las que están las zonas más despobladas del país. Los 737 habitantes por kilómetro cuadrado del 12,9% de la España poblada son muy superiores a los 544 de Holanda o los 493 del Reino Unido, por no hablar de los 374 de Alemania o los 168 de Francia. La «anomalía» española no es nueva. Los autores del informe recuerdan que Brenan citaba a Cornaro, embajador veneciano en la corte española que, en 1682, escribía: «España da la impresión de ser como el desierto de Libia, por lo despoblada que está». «Comprender las consecuencias económicas de la anomalía española de la distribución de la población constituye una emocionante línea de investigación abierta», concluyen los expertos al final de su informe. El estudio no habla de eso pero está demostrado que el bicho es feliz donde hay mucha población concentrada y España está la cabeza de Europa en ese terreno. Coincidencia o no.