Política

Cumbre hispano-marroquí

El interés general de España no puede estar subordinado al particular de Sánchez

Próximamente se celebrará en Rabat la XII RAN-Reunión de Alto Nivel, o Cumbre bilateral hispano-marroquí, y la noticia es que el vicepresidente Iglesias no asistirá. El motivo aducido oficialmente ha sido «la reducción de la delegación española debida al coronavirus», pero todo el mundo sabe que la verdad es que no irá para no incomodar a nuestros anfitriones y, en definitiva, para hacer posible la misma cumbre.

Lo cierto es que si algún fruto positivo cabe esperar de este encuentro, la asistencia de Iglesias lo convertiría en imposible, muy en especial en el ámbito migratorio. Este hecho no hace sino poner de manifiesto una realidad insoslayable: la presencia en el Gobierno de una formación política como Podemos es lesiva para el interés general de España. Si la estabilidad política e institucional del Reino Alauita es estratégica para España, un Gobierno de coalición como el de Sánchez e Iglesias, con los apoyos que necesita para mantenerse –ERC y Bildu–, es todo lo contrario a lo que nosotros precisamos para transmitir confianza y credibilidad a nuestros socios.

Nunca hasta ahora el Rey Mohamed VI había negado una audiencia solicitada con tal ocasión por nuestro presidente, y hasta ahora no se ha confirmado «por motivos de agenda». Imagino que el problema se solucionará finalmente, pero la confianza política es descriptible, como vemos.

La agenda bilateral en ámbitos como las relaciones comerciales, laborales, migraciones, narcotráfico, terrorismo, etc… es demasiado importante para ponerla bajo sospecha. El interés general de España no puede estar subordinado al particular de Sánchez .