Calma y paz

«No hay mejor defensa de la libertad y de la convivencia que vuestro ejemplo en los centros educativos para preservar nuestra democracia y nuestro estado de derecho que con tanto esfuerzo hemos construido entre todos”, con estas palabras su majestad el rey Felipe VI clausuraba los emotivos premios de la Fundación Víctimas del Terrorismo.

Iñaki Arteta Orbea, premio a la Defensa de los Derechos Humanos Adolfo Suárez 2020, volvió a llegarnos al alma como hace con cada una de sus películas. Siempre sintió un gran dolor por la violencia terrorista y eligió estar del lado de las víctimas. Gracias por arriesgarte, comprometerte, pero sobre todo por agitar conciencias con tus documentales. Siempre nos llegas directamente al corazón. Como cuando dijiste, tras tu merecidísimo premio, que en todas las entrevistas y encuentros que has tenido con víctimas del terrorismo has encontrado bondad, autenticidad, calma y paz, algo que no has visto en quienes siguen manteniendo el discurso del odio y que tienen tanto protagonismo. Ahora político. Ojalá que el ministro del Interior, allí presente, traslade estos valores tan necesarios a sus socios políticos.

Javier Marrodán recibió el Premio de Periodismo Fernando Delgado 2020 por su labor informativa y su lucha frente a la manipulación del relato “sin olvidos cómplices o interesados”. Los Premios Escolares Ana María Vidal-Abarca, “Una ciudad sin violencia” 2020, fueron para víctimas que se sumaron al proyecto “Educar para la convivencia” por llevar su testimonio directo a las aulas fomentando el diálogo y explicando que ningún fanatismo puede justificar un solo asesinato.

El momento más emotivo ha sido el recuerdo de nuestro querido y admirado comandante Aliste, quien perdió las dos piernas en un atentado de ETA en 1995 y que falleció hace apenas unos meses dejando un profundo dolor pero también el recuerdo de su sonrisa permanente. Estaban allí sus tres hijos, su viuda y su nieto de 20 años. Su hijo mayor pronunció unas bellas palabras acerca de su trayectoria y labor.

No faltó el homenaje a las víctimas del COVID-19. Gracias por el cariño que de nuevo sentimos y ojalá que también nuestro Rey lo haya sentido. Lo necesitamos.