Gobierno de España

Iglesias, chulería y supervivencia

«La capacidad de Iglesias de generar conflictos a Sánchez aumenta fuera del Gobierno»

Pablo Iglesias quizá no tenía otra salida, pero su decisión de concurrir en persona a las elecciones a la Comunidad de Madrid es la constatación de su fracaso. Hay pocos precedentes, si es que los hay, de alguien que renuncie a la vicepresidencia –aunque con pocas funciones– de un país como España para participar en unas elecciones autonómicas en las que sus opciones son muy limitadas y menos las de encabezar un futuro gobierno madrileño. Iglesias, con esa chulería que recuerda a aquella de 2015 cuando le decía a Sánchez que gracias a él y a un guiño del destino llegaría a la Moncloa, deja el Gobierno porque Unidas Podemos tenía el riesgo de desaparecer del parlamento madrileño a partir del próximo 4 de mayo. Esa tesitura, contemplada en la mayoría de encuestas, ponía en peligro la supervivencia futura –más allá de una posición residual– del partido del todavía vicepresidente. Iglesias juega fuerte y, al mismo tiempo, le crea un quebradero de cabeza a su teórico, solo teórico, socio de Gobierno, Pedro Sánchez, incluido el desaire chulesco de anunciar como ha hecho que él mismo sería sustituido en la vicepresidencia por Yolanda Díaz. La mínima cortesía entre compañeros de coalición reclamaba otras formas. El inquilino de la Moncloa y su gurú Iván Redondo siempre supieron que no podían fiarse de Iglesias, que el juego iba de «pillo a pillo» y que sería decisivo cómo gestionar la ruptura. El adiós al Gobierno del próximo ex-vicepresidente, no es un divorcio total, pero sí una crisis que desestabiliza, en cierta medida, a Sánchez. La capacidad de generar conflictos de Iglesias será mucho mayor fuera que dentro del Gobierno. Ahora, la batalla de Madrid es la batalla de toda España y, al mismo tiempo, son también muchas guerras particulares y fratricidas, en la izquierda y en la derecha. Los dos años de tregua y «pax» electoral soñados por Sánchez se han esfumado por errores de estrategia inexplicables. Y todo se enreda más porque es probable que lo consiga, pero en ninguna parte está escrito que Isabel Díaz Ayuso tenga asegurado el Gobierno de Madrid a partir del 4 de mayo.