Elecciones Comunidad de Madrid

Ayuso reivindica Génova

Otra consecuencia del 4-M y del arrollador triunfo de Ayuso es la rehabilitación de Génova como sede central del PP, tanto de la dirección nacional como regional de Madrid.

El martes el balcón de Génova volvió a ser el de las noches de triunfo de las no pocas exitosas jornadas electorales de ese pasado que, al parecer, lastraba la victoria de sus actuales moradores. Como sabemos, Génova estaba considerada símbolo responsable de los nefastos resultados en Cataluña del 14-F, al ser la imagen e historia de «un pasado de corrupción que había que dejar atrás definitivamente».

Lo cierto es que han bastado menos de tres meses y otras elecciones autonómicas para desmontar tal imaginativa imputación, reivindicada además con sus votos por los mismos vecinos de Madrid.

Sabido es que el éxito tiene muchos autores y el fracaso muy pocos, aunque Rudyard Kipling alentaba a tratar a ambos con similar desdén, dado que «son dos impostores». La noche del 4-M vimos esas dos caras en Génova y en Ferraz, con Casado haciéndose coautor del triunfo de Ayuso, mientras Gabilondo, aislado y abandonado por Moncloa y Ferraz, asumía en solitario su fracaso en un hotel, alejado de su clausurada sede. Pese a ello, el Doctor en Filosofía no perdió la compostura en una Noche Triste que iguala en proporción a la alegría de Génova por la victoria de Otumba.

«Sic transit gloria mundi», ahora no solo en las personas, sino también para los edificios. Otra conquista de Ayuso: Génova reivindicada en su honor.