Jamaica
El riesgo populista
No me gusta coincidir con el gran chamán del PP, Pedro Arriola, pero Podemos y la victoria de Syriza en Grecia son una baza electoral muy buena para el PP. Desde tiempos inmemoriales, el hombre ha querido adivinar el futuro y así ajustar sus decisiones presentes esperando acertar. Los romanos tenían los augures que miraban las señales del cielo, analizaban el graznido de cuervos, grajos y lechuzas y miraban las vísceras de los animales. Hay que reconocer que hemos evolucionado y ahora la adivinación tiene como fundamento las encuestas. Los modernos chamanes y augures son los sociólogos como Arriola. Ahora no es necesario lanzar huesos en un cuenco u otras prácticas ancestrales porque llega el sociólogo de cabecera –unos más serios que otros–, e interpreta el futuro. El poder real no está ya en las ejecutivas de los partidos, sino en el modelo de cesarismo presidencialista, donde el gran chamán hace y deshace a su antojo con sus predicciones, interpretaciones y antipatías hacia los que no gozan de su favor. La «ciencia» del chamanismo moderno es realmente fascinante. Arriola es un auténtico maestro, porque es capaz de sobrevivir a pesar del rechazo generalizado que concita entre la dirección del PP.
Durante años estuvo al lado del «niño» –como llamaba a Aznar–, y ahora está con Rajoy, que es uno de los mejores políticos españoles desde la Transición hasta nuestros días. Nunca entenderé para qué necesita un gran chamán. Aznar le hizo director de campaña y no paró de ganar elecciones en el 1994, 95, 96 y 2000. El instinto y la capacidad política del actual presidente del Gobierno sigue siendo la mejor baza del PP para ganar las autonómicas y municipales, así como las generales.
El discurso que pronunció ayer fue excelente. Una vez más irrumpe el mejor Rajoy, que no necesita de una corte de pelotas a su alrededor que se refieran a él como el jefe o el patrón, como si fuera el dueño de una plantación en Jamaica. El actual presidente del Gobierno tiene una trayectoria política y personal intachable en todos los cargos que ha ejercido. Es un político serio, riguroso, eficaz y honrado, que puede recuperar los electores populares que están enfadados o desengañados. Es convincente porque siempre ha pedido perdón por sus errores y se ha disculpado por tener que adoptar medidas muy duras para sacar a España de la crisis.
La referencia a la «ruleta del populismo» es muy explícita y clarificadora sobre los riesgos que puede correr la sociedad española si adopta una actitud suicida, como ha sucedido en Grecia con la victoria de Syriza. Los griegos están en su derecho, pero no es la primera ni será la última vez que una sociedad opta por el desastre. Las circunstancias de nuestra economía y la fuerza de las estructuras, que algunos llaman frívolamente el sistema, son muy sólidas. Hemos sido capaces de superar la mayor crisis desde la posguerra.
Han sido años muy difíciles, pero la actuación de Rajoy y su equipo ha sido impecable a pesar de algunos errores que ahora es muy fácil señalar. La recuperación no está sólidamente asentada, porque el populismo sigue siendo un grave riesgo y un factor de gran incertidumbre. Como hace en su vídeo, tiene que llamar a la puerta, dar las gracias y explicarlo.
✕
Accede a tu cuenta para comentar