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Vigilados desde el móvil latido a latido

Un dispositivo colocado bajo la piel envía señales al móvil cuándo el ritmo cardiaco se altera y avisa al médico

El médico tiene una imagen 3D del corazón del paciente
El médico tiene una imagen 3D del corazón del pacientedreamstimeDreamstime

Manuel Magallanes se desmayó sin motivo alguno mientras iba por la calle. En principio le dijeron que fue por culpa de una bajada de tensión, pero para conocer de verdad qué pasó "me colocaron un chip, bajo la piel, que manda el ritmo de mi corazón en tiempo real al móvil. Si pasa algo, seguro que los médicos lo detectan". Manuel, además es ciego, pero es una amante de las nuevas tecnologías y confía en ellas para cuidar su salud. En este caso, este paciente se beneficia del primer y único monitor cardiaco continuo compatible con "smartphones", que sirve para monitorizar de forma muy precisa cualquier latido anómalo en el corazón de los afectados.

Cerca de un millón de españoles podría padecer fibrilación auricular, uno de los tipos de arritmia más común. De hecho, se calcula que 90.000 afectados podrían padecer esta patología u otro tipo de arritmia y no saberlo debido a que estos trastornos del rimo cardiaco no siempre son perceptibles para los pacientes. Ermengol Vallès, cardiólogo de la Unidad de Arritmias del Hospital del Mar de Barcelona, cuenta que "con este dispositivo, que los pacientes pueden llevar a modo de 'holter', pero en una mejor versión, porque se pone bajo la piel -a modo de marcapasos- y registra el ritmo del corazón en todo momento durante largos periodos de tiempo". Esto ayuda a los clínicos a distinguir entre falsos positivos y negativos de pruebas puntuales, ya que muchas veces los casos de FA quedan enmascarados y no dan la cara tan fácilmente.

"No me cuesta nada llevar el móvil a todos los sitios. Además, como me gusta la tecnología llevo el Apple Watch que registra todo lo que hago y se lo enseño al médico. Así me ajustan la medicación", explica Manuel. Él lleva dos años con el implante, que le colocaron en el Hospital Universitario de Badajoz, y ha visto mejoras en su condición de salud gracias al ajuste de la dosis de la medicación que tomaba, porque era en exceso.

Solución precisa

Vallés comenta que "colocar el implante es muy sencillo: un pinchazo en la piel, es apenas un ahora. Se trata de un proceso ambulatorio" y al mismo tiempo subraya que "nos ofrece una oportunidad grande para descubrir las taquicardias asintomáticas, son casos en los que la FA permanece silente". Pero detectarlas a tiempo y poner en tratamiento a las personas que lo sufren resulta primordial para evitar embolias e ictus. La terapia es sencilla, ya que los pacientes deben tomar antocogulantes y vigilar su ritmo cardiaco.

Aunque todos los monitores cardiacos implantables realizan un registro automático de las arritmias, muchos de ellos exigen un alto grado de participación por parte de los pacientes a la hora de activar un registro con opción de asociarlo a un síntoma. Una tarea difícil de llevar a cabo cuando el paciente se siente mareado o su corazón late a gran velocidad. El nuevo sistema de Abbott de monitorización continua cardiaca, denominado ConfirmRX, no sólo envía de forma automática los datos de ritmo cardiaco a través de una aplicación móvil si no que, además, permite al individuo activar los episodios en tiempo real mediante la misma app móvil, de forma que puede prescindir de un activador de episodios externo. El nuevo equipo cuenta con una longevidad de dos años y la aplicación móvil está disponible en cuarenta idiomas.

Un problema real

Las arritmias cardiacas constituyen un importante y extendido problema sociosanitario. De hecho, las arritmias son uno de los primeros motivos de consulta al cardiólogo y según datos de la Sociedad Española de Cardiología constituyen la causa de más del 16 % de los ingresos hospitalarios, afectando a más del 1 % de la población general. En relación a la fibrilación auricular, como la arritmia más común de todas, es una enfermedad grave, ya que puede producir coágulos de sangre que pueden viajar desde el corazón hasta el cerebro y causar un infarto cerebral.