Salud

Coronavirus y diarrea: «La mitad de los pacientes presenta síntomas digestivos»

Guillermo Álvarez Calatayud, gastroenterólogo pediátrico del Hospital Gregorio Marañón y presidente de la Sociedad Española de Microbiota, Probióticos y Prebióticos, nos habla de la vinculación entre coronavirus y problemas gastrointestinales

Guillermo Álvarez, presidente Sociedad Española de Microbiota, Probióticos y Prebióticos y gastroenterólogo pediátrico del Hospital Gregorio Marañón de Madrid
Guillermo Álvarez, presidente Sociedad Española de Microbiota, Probióticos y Prebióticos y gastroenterólogo pediátrico del Hospital Gregorio Marañón de MadridHospital Gregorio Marañón de Madrid

1. ¿Cuál es la relación del Covid-19 con el tracto intestinal?

La infección por el coronavirus (COVID-19) suele presentar síntomas parecidos a los de una gripe con fiebre, tos seca, disnea, dolores musculares y fatiga. En las primeras publicaciones científicas chinas (donde se originó la enfermedad) los casos con síntomas digestivos eran escasos (menos del 5%) que contrastaba con las series de los países occidentales como España donde aparecían con más frecuencia, sobre todo en los niños.

2. ¿Las diarreas, nauseas y vómitos que aparecen en algunos pacientes son la consecuencia de esa relación?

Es probable que muchos de los síntomas gastrointestinales como la diarrea, los vómitos o el dolor abdominal, estén ocasionados por la acción directa del virus sobre la mucosa intestinal como ocurre en otras infecciones víricas, pero también puede ser debido a los fármacos antivirales o antiinfecciosos que se emplean en su tratamiento. Esto puede provocar un desequilibrio en el ecosistema microbiano intestinal con una disminución considerable del número de bacterias intestinales beneficiosas.

3. ¿Aparecen más en la fase de inicio de la enfermedad o en la fase tardía?

Aunque al principio se dio más importancia a los síntomas respiratorios, muchos pacientes se quejaban de síntomas digestivos leves, especialmente la diarrea que seguramente no fueron recogidos porque generalmente se presentaron antes que la fiebre. De ahí, que las primeras estadísticas se recogieran tan pocos casos. Actualmente, aproximadamente la mitad de los pacientes sí los presentan. Sí se ha observado que según se va agravando la enfermedad estos síntomas son más frecuentes. De hecho, la cuarta parte sólo tienen síntomas digestivos y la enfermedad suele ser más grave.

4. Decíamos que esos síntomas solo aparecen en algunos pacientes, pero ¿en todos está presente el coronavirus en las heces?

Es muchos pacientes con infección por Covid-19 se ha logrado aislar el virus en heces (entre 20-50%) aunque no todos con síntomas gastrointestinales por lo que no parece que tenga una buena correlación. Incluso se han detectado cuando el diagnóstico de las pruebas nasofaríngeas, la clásica PCR, ya se habíannegativizado. Esto tendría importancia por la posible trasmisión fecal-oral del virus (además de la conocida respiratoria) entre el alto porcentaje de pacientes que se cree que son asintomáticos (hasta un 80%) y que podrían transmitir la enfermedad por esta vía, por lo que el lavado de manos es fundamental como medida preventiva.

5. En cuanto a la microbiota intestinal ¿cómo se altera con el Covid-19?

Todavía no está muy claro porqué el Covid-19 produce síntomas gastrointestinales. Aunque se está en fase de investigación, estamos seguros que la microbiota intestinal está jugando un papel importante en la susceptibilidad de la progresión y la gravedad de la enfermedad por Covid-19. Esprobable que en su patogenia intervenga la enzima ACE-2, importante regulador de la inflamación intestinal y receptor necesario para que el virus ingrese en las células huésped. Con las precauciones debidas, en un futuro, el perfil de la microbiotapodría ser un marcador pronóstico de la enfermedad.

6. ¿Los probióticos pueden modular la microbiotaintestinal para mejorar los síntomas gastrointestinales?

La interacción que el ser humano tiene con la microbiota intestinal juega un rol fundamental en el mantenimiento y equilibrio del sistema inmunitario. Los probióticos, que son bacterias vivas como las de nuestra microbiota contribuyen a reforzarla, sobre todo, en situaciones en las que tanto su cantidad como su calidad pueden estar alteradas y reducidas. Esto ocurre, por ejemplo, cuando tomamos antibióticos en las infecciones, como las diarreas o en situaciones de estrés.

7. ¿También conseguirían evitar las complicaciones digestivas de los pacientes?

En la actualidad no hay todavía estudios que nos puedan confirmar que los probióticos puedan ser útiles en estos pacientes. Sí estamos seguros de su probable efecto preventivo. Muchos medicamentos, además de los antibióticos, como el omeprazol o los antiinflamatorios, alteran nuestra microbiota y secundariamente el sistema inmune, por lo que la debemos cuidar a lo largo de toda la vida. También es fundamental llevar una alimentación equilibrada. Nunca sabremos si nuestros ancianos en los que hay muchos desórdenes alimentarios podrían haber hecho frente mejor al Covid-19 si hubiesen tenido una microbiota menos empobrecida.

8. ¿Y hasta ejercer una función protectora del aparato respiratorio?

Aunque la mayoría de las evidencias científicas de la eficacia de los probióticos se presentan en el tracto digestivo, sabemos que hay cepas específicas que parecen conferir un notable grado de protección frente a ciertos virus respiratorios en niños (como el virus sincitial) lo que podría mantener a raya a las bacterias que causan infecciones secundarias, además de mejorar la inmunidad y los mecanismos de barrera en las mucosas respiratorias.

9. Porque lo cierto es que el daño principal que causa este virus parece ser en el aparato respiratorio, pero ¿no es frecuente que las personas con enfermedades respiratorias acaben teniendo alteraciones intestinales secundarias? ¿Por qué?

No tiene porqué ser lo habitual,debiéndose, muchas veces, a los efectos secundarios de los fármacos. Aunque, en esta enfermedad, al tratarse de un virus tan agresivo seguramente afecte de una manera importante a la inmunidad del organismo provocando alteraciones en muchas partes del cuerpo como el aparato respiratorio, el tracto gastrointestinal, la coagulación de la sangre, la piel, etc.

10. Recordemos dónde están los probióticos y cómo los debemos tomar.

Los probióticos los podemos encontrar, habitualmente, en los yogures y leches fermentadas (sobre todo, los reforzados) pero, sobre todo, en preparados comerciales que se venden en las farmacias. Su acción es la de mejorar nuestra microbiota intestinal que está íntimamente relacionada con el sistema inmune y que nos previene de numerosas enfermedades, alergias, etc. Por supuesto, una dieta equilibrada con más frutas y verduras y menos grasas saturadas y un estilo de vida saludable también contribuyen a mantener una microbiota mejor.