¿Cuántas veces deberíamos hacer pis al día?

Muchas personas se preguntan cuántas veces se considera normal ir al baño. Sin embargo, no existe un número establecido que podamos considerar “normal”, ya que existen varios factores que pueden influir en la frecuencia con la que un individuo orina a lo largo del día. Los medicamentos, los suplementos, los alimentos y las bebidas pueden desempeñar un papel determinante, al igual que ciertas afecciones médicas, la edad y el tamaño de la vejiga. Asimismo, los cambios hormonales y la presión sobre la vejiga involucrados en el embarazo también pueden aumentar la producción de orina y su frecuencia y los síntomas pueden continuar hasta 8 semanas después del parto.

¿Qué factores afectan a la frecuencia urinaria?

Existen varios factores que pueden alterar la frecuencia con la que necesitamos ir al baño, uno de los que más influyen es el consumo de alcohol y cafeína. Si una persona consume grandes cantidades de líquidos, especialmente bebidas que contienen cafeína, puede notar diferencias en la cantidad o la frecuencia con la que orina.

Sin embargo, los cambios drásticos en la frecuencia urinaria pueden indicar una afección subyacente grave. Estas son las condiciones que pueden ser responsables de los cambios en la frecuencia urinaria:

• Infección del tracto urinario (ITU): puede causar micción frecuente, urgencia urinaria, sensación de ardor o dolor al orinar y dolor de espalda. Las infecciones urinarias son muy comunes, especialmente entre las mujeres. El tratamiento con antibióticos suele ser necesario.
• Vejiga hiperactiva: se produce una micción frecuente relacionada con varios problemas, que incluyen infecciones, obesidad, desequilibrios hormonales y daño a los nervios. La mayoría de los casos son fácilmente tratables.
• Cistitis intersticial: esta afección a largo plazo también se conoce como síndrome de vejiga dolorosa. Aunque no hay infección involucrada, causa síntomas similares a una ITU. Se desconoce la causa exacta, pero a menudo está relacionada con la inflamación de la vejiga.
• Diabetes: la diabetes no diagnosticada o mal controlada puede conducir a niveles altos de azúcar en la sangre, lo que puede alterar la frecuencia con la que orinamos.
• Hipocalcemia o hipercalcemia: los niveles altos de calcio (hipercalcemia) o los niveles bajos de calcio (hipocalcemia) afectan directamente a la función renal y pueden alterar la producción de orina.
• Anemia de células falciformes: esta forma hereditaria de anemia, o recuento bajo de glóbulos rojos, puede afectar los riñones y la concentración de orina, lo que provoca que algunas personas orinen con más frecuencia.
• Problemas de próstata: una próstata agrandada hace que una persona orine menos. También pueden experimentar dificultades a medida que la próstata se agranda y bloquea el flujo de orina.
• Debilidad del suelo pélvico: a medida que los músculos pélvicos pierden fuerza, una persona puede orinar con más frecuencia. Esto suele ocurrirle a las mujeres tras dar a luz.

Síntomas de orinar con poca o demasiada frecuencia

La mayoría de las personas orinan entre 6 o 7 veces al día. Sin embargo, orinar en raras ocasiones o con demasiada frecuencia puede indicar una afección subyacente, especialmente cuando se acompaña de los siguientes síntomas:

• Dolor de espalda.
• Sangre en la orina.
• Orina turbia o descolorida.
• Dificultad para orinar.
• Fiebre.
• Pérdidas de orina.
• Dolor al orinar.
• Orina de olor fuerte.

Cabe destacar que, cualquiera que note un cambio drástico en la frecuencia o la producción urinaria, incluso si se encuentra dentro de los parámetros normales, debe consultar a un médico.

¿Por qué orinamos menos cuando dormimos?

El cuerpo produce naturalmente una hormona llamada hormona antidiurética (ADH), también llamada vasopresina, que le indica a los riñones cuánta agua deben retener. Por la noche, mientras dormimos, los niveles de ADHaumentan para evitar que nos despertemos para ir al baño. Sin embargo, a medida que envejecemos, los niveles de ADH disminuyen, por lo que es más común que las personas mayores tengan que levantarse en medio de la noche para orinar.

Por último, las personas sin nicturia, que es como se conoce al hecho de despertarse por la noche frecuentemente con la necesidad de orinar, generalmente pueden pasar una noche completa (de seis a ocho horas) sin tener que ir el baño. Pero, si tiene que levantarse una vez durante la noche para orinar, no se preocupe, puede ser normal. No obstante, tener que hacerlo más de una vez puede indicar un problema mayor, entre los que se incluyen: ITU, tumores de vejiga y próstata, debilidad del suelo pélvico y problemas con el control de esfínteres.