Los seis factores que hacen que puedas tener cansancio crónico

A menudo, sentir cansancio es algo normal al despertar o antes de ir a dormir. No obstante, hay ocasiones en las que esa fatiga persiste durante todo el día, lo que se convierte en un problema que afecta a quienes, a pesar de haber tenido suficiente sueño, se sienten constantemente exhaustos. En tales situaciones, no existe una única respuesta para este enigma, ya que la fatiga puede derivar de diversas causas. En ese sentido, el portal 'Runner's World' identifica cuatro posibles desencadenantes de esta fatiga constante:

Trastornos del sueño

Los problemas relacionados con el sueño pueden impactar directamente en la cantidad y calidad de las horas de descanso, lo que lógicamente puede dar lugar a la fatiga. Uno de los trastornos más conocidos es la apnea del sueño, un problema común (afecta al 26 % de los adultos) que se caracteriza por interrupciones repentinas en la respiración durante el sueño.

Diabetes tipo 2

Otro factor que no está relacionado directamente con el sueño es la diabetes tipo 2, una enfermedad que afecta la regulación de la insulina en el cuerpo, y por lo tanto, incide en los niveles de azúcar (energía) en la sangre. La fatiga es uno de los síntomas de este desequilibrio, y puede persistir incluso después de regular los niveles de azúcar.

Enfermedades autoinmunes

En el ámbito de las enfermedades autoinmunes, también se encuentra una posible causa de la fatiga constante. Estas enfermedades son trastornos en los que el sistema inmunológico, responsable de proteger al cuerpo, ataca por error sus propios tejidos. Ejemplos de enfermedades autoinmunes incluyen el lupus, la diabetes tipo 1 y la artritis reumatoide.

Depresión

No todas las causas de la fatiga crónica son de naturaleza física. Trastornos mentales como la depresión, que afectan el estado de ánimo y pueden llevar a una sensación constante de tristeza, pueden generar fatiga. Además, la depresión puede perturbar el sueño, lo que agrava aún más la fatiga.

Anemia

La fatiga no solo está relacionada con los niveles de azúcar en sangre; los minerales, como el hierro, también desempeñan un papel importante en este aspecto. La anemia, que se produce debido a la falta o insuficiencia de hierro en los glóbulos rojos, puede provocar síntomas de fatiga, ya que la sangre no puede transportar suficiente oxígeno al cuerpo.

Hipotiroidismo

Finalmente, otro factor que se asocia a la fatiga es el hipotiroidismo, una disfunción de la glándula tiroides, que regula el metabolismo a través de la producción de hormonas. Si esta glándula no funciona correctamente y se produce un desequilibrio hormonal, una de las consecuencias del hipotiroidismo puede ser la fatiga constante que siente la persona afectada.