Tratarse las encías tras una ablación cardíaca reduce en un 61% la probabilidad de volver a sufrir fibrilación auricular

Las arritmias son problemas con la frecuencia de los latidos del corazón. Pueden hacer que lata demasiado rápido o de forma irregular.

La ablación cardíaca permite reestablecer el latido cardíaco normal en pacientes con fibrilación auricular.

Ahora, un nuevo estudio publicado en el "Journal of the American Heart Association" ha descubierto que a los tres meses de someterse a este procedimiento de ablación cardíaca los pacientes deberían acudir al dentista para hacerse un tratamiento para la enfermedad de las encías, como gingivitis o periodontitis, ya que puede reducir el riesgo de recurrencia de un ritmo cardíaco irregular.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE UU, aproximadamente la mitad de los adultos estadounidenses de 30 años o más tienen algún tipo de enfermedad periodontal o de las encías, y la incidencia aumenta con la edad.

Este estudio es uno de los primeros en investigar el impacto potencial del tratamiento de la enfermedad de las encías en la fibrilación auricular, una afección en la que el corazón late de forma irregular, lo que aumenta cinco veces el riesgo de sufrir un derrame cerebral.

Se espera que más de 12 millones de personas en los EE UU padezcan fibrilación auricular para 2030, según las Estadísticas de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares de 2024 de la Asociación Estadounidense del Corazón .

“La enfermedad de las encías se puede modificar mediante una intervención dental. El tratamiento adecuado parece mejorar el pronóstico de la fibrilación auricular, y muchas personas en todo el mundo podrían beneficiarse de él”, afirma en un comunicado el autor principal del estudio, Shunsuke Miyauchi, profesor asistente en el Centro de Servicios de Salud de la Universidad de Hiroshima, en Japón, que se dedica a la Cardiología en general y a la investigación de arritmias, en particular.

Para llegar a esta conclusión, los investigadores siguieron a 97 pacientes que se habían sometido al procedimiento no quirúrgico para corregir la fibrilación auricular mediante ablación con catéter por radiofrecuencia.

Recibieron tratamiento para la inflamación de las encías junto con 191 pacientes de ablación que no recibieron tratamiento para la enfermedad de las encías.

La ablación con catéter es un procedimiento que utiliza energía de radiofrecuencia para destruir una pequeña área de tejido cardíaco que provoca latidos cardíacos rápidos e irregulares.

Este estudio encontró que un índice que medía la gravedad de la inflamación de las encías se asociaba con el regreso de la fibrilación auricular. .

Después del procedimiento de ablación, durante el período de seguimiento promedio de entre 8,5 meses y 2 años, los investigadores encontraron que la fibrilación auricular volvió en el 24% de todos los participantes durante el período de seguimiento.

Los pacientes con inflamación grave de las encías que recibieron tratamiento después de la ablación con catéter cardíaco tenían un 61 % menos de probabilidades de volver a tener fibrilación auricular en comparación con los pacientes con ablación que no recibieron tratamiento para la inflamación grave de las encías.

Los pacientes que tuvieron recaídas de fibrilación auricular tuvieron una enfermedad de las encías más grave que aquellos que no tuvieron recurrencias.

Tener enfermedad de las encías, ser mujer, experimentar latidos cardíacos irregulares durante más de dos años y el volumen de la aurícula izquierda fueron factores predictivos de recurrencia de la fibrilación auricular.

Respecto al último factor, "el volumen de la aurícula izquierda a menudo conduce a la recurrencia de la fibrilación auricular, ya que incluye engrosamiento y cicatrización de los tejidos conectivos", explicó Miyauchi.

Y "si bien los hallazgos principales coincidieron con nuestras expectativas, nos sorprendió lo útil que podría ser un índice cuantitativo de la enfermedad de las encías, conocido como superficie periodontal inflamada en la práctica clínica cardiovascular".