Salud

Las infecciones nasales que pueden acelerar la progresión de la enfermedad de Alzheimer

Un estudio publicado en la revista ‘Neurobiology of Aging’ afirma que los virus pueden inflamar e interrumpir las conexiones entre el sistema olfativo y la zona del cerebro asociada con la memoria y el aprendizaje

Células en un cerebro afectado por la enfermedad de Alzheimer
Células en un cerebro afectado por la enfermedad de AlzheimerlarazonAgencia AP

La enfermedad de Alzheimer, una forma de demencia, se descubrió a principios del siglo XX. Sin embargo, a pesar de varias décadas de investigación, nunca se ha encontrado una cura para esta patología.Un reciente estudio publicado en la revista ‘Neurobiology of Aging’ plantea la hipótesis de que las infecciones virales olfativas pueden acelerar la progresión de la enfermedad. Según los autores de la investigación, estos hallazgos podrían conducir a nuevas terapias que detecten antes el alzhéimer mientras ayudan a aclarar el papel que juegan los virus y el sistema olfativo en el desarrollo de la enfermedad.

”Sabemos que uno de los primeros signos de la enfermedad de Alzheimer es la pérdida del sentido del olfato”, señala el autor principal del estudio, Andrew Bubak, profesor asistente de investigación en la división de neurología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Colorado. El equipo de investigadores se centró en el tracto olfativo, el bulbo olfativo (estructura cerebral que recibe estímulos relacionados con los olores) y el hipocampo (área del cerebro que gestiona la memoria y el aprendizaje). Analizaron los tejidos de seis personas con enfermedad de Alzheimer hereditaria (FAD, por sus siglas en inglés) y los de un grupo de control. Encontraron rastros de infección viral en los bulbos olfatorios del grupo FAD así como inflamación en las vías olfativas que transmiten impulsos al hipocampo.

También descubrieron alteraciones de la mielina en los nervios olfativos. La mielina es una capa protectora de las células nerviosas que permite la transmisión eficiente de señales. “Estos hallazgos plantean la posibilidad de que la infección viral y la inflamación asociada y la desregulación de la mielinización del sistema olfativo puedan alterar la función del hipocampo, contribuyendo a la aceleración de la progresión de la enfermedad de Alzheimer hereditaria”, señalan los investigadores.

Diego Restrepo, profesor de biología celular de la Facultad de Medicina de CU, explica que durante mucho tiempo se ha sospechado que los virus desempeñan un papel en los problemas cognitivos. De hecho, algunas investigaciones han asociado el virus SARS-CoV-2, que causa la Covid-19, con la demencia. El virus, que viaja por la nariz, hace que algunos de los infectados pierdan el sentido del olfato. Al mismo tiempo, el virus de la varicela zoster que causa el herpes zóster y el virus del herpes simple pueden depositar en el bulbo olfativo beta amiloide, una proteína fundamental para el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. Estos virus a menudo persisten durante años incluso después de que los síntomas hayan desaparecido.

”Nuestra hipótesis es que algunos virus aceleran la enfermedad de Alzheimer. ¿La pérdida del olfato acelera específicamente el Alzheimer? Esa es la pregunta”, señala el doctor Diego Restrepo. Según él y sus colegas, la inflamación descrita y los depósitos de amiloide en el sistema olfativo alteran la comunicación con el hipocampo. Sin la cantidad adecuada de estímulos, puede comenzar a degenerar. “Todo el sistema olfativo se conecta con el hipocampo. Si la afluencia de señales que se produce de esta manera es limitada, menos de ellas llegan al hipocampo. Y un órgano que no se usa, desaparece”, afirman los investigadores.