Pastillas
Adiós al agua: el farmacéutico Eduardo Palomera revela el mejor líquido para tomar pastillas si tienes dificultades para hacerlo
Cuando usamos agua, la pastilla puede flotar o pegarse al paladar o la garganta, haciendo que el hecho de tragarla se vuelva más difícil
Para muchas personas, tomar pastillas es una molestia, y lo primero que hacen para facilitar el momento es acompañarlas con un vaso de agua. Sin embargo, aunque suene contradictorio, ese gesto habitual podría estar dificultando aún más el proceso. Por eso, expertos en farmacia proponen una alternativa mucho más sencilla y efectiva que podría cambiar por completo la manera en que tomas tus medicamentos.
¿Por qué el agua no siempre ayuda?
Aunque tomar pastillas con agua es lo que siempre nos han enseñado, lo cierto es que no funciona igual para todo el mundo. Cuando usamos agua, la pastilla puede flotar o pegarse al paladar o la garganta, haciendo que el hecho de tragarla se vuelva más difícil. Además, para quienes tienen un reflejo de náusea sensible, ese intento puede terminar siendo una experiencia frustrante.
La alternativa: texturas más densas
Según Eduardo Palomera, farmacéutico experto, una solución muy práctica es cambiar el agua por alimentos de textura más espesa, como yogur líquido, puré de frutas o incluso un batido. Estos ayudan a “envolver” la pastilla y facilitar su paso por la garganta de forma más natural y suave. Es como camuflarla en algo que el cuerpo ya reconoce como alimento, haciendo que tragarla sea mucho más sencillo.
“No utilices mucha agua para tragarte la pastilla si eres de los que tienen dificultades para hacerlo. En su lugar, usa yogur líquido, puré de frutas o bebidas vegetales, ya que ayudan a estimular el reflejo de la deglución”, explicó Palomera.
Un truco sencillo que puede marcar la diferencia
Otra técnica útil consiste en colocar la pastilla sobre la lengua, tomar un pequeño sorbo de agua (solo si no puedes evitarlo), inclinar la cabeza hacia el pecho y tragar. Parece simple, pero esta postura ayuda a abrir el esófago de manera más favorable para que la pastilla baje sin esfuerzo. El farmacéutico recomienda practicar primero sin la pastilla, solo con saliva, para poder acostumbrarse.
En algunos casos, si tragar pastillas sigue siendo un reto, puede considerarse partirlas o triturarlas. Sin embargo, no todos los medicamentos permiten esto, ya que hacerlo podría alterar su efecto. Por eso, es importante leer el prospecto o consultarlo con un farmacéutico antes de intentar cualquier modificación.