Europa
Alerta sanitaria en Europa por el aumento de casos de la peligrosa bacteria “come carne”
Las autoridades advierten sobre el crecimiento de infecciones por Vibrio vulnificus, asociadas al consumo de marisco crudo, y recomiendan extremar precauciones
Las autoridades sanitarias han lanzado una advertencia urgente ante el incremento de casos de infección por la bacteria Vibrio vulnificus, conocida popularmente como “bacteria come carne”. Esta cepa, altamente agresiva, se asocia principalmente al consumo de marisco crudo, especialmente ostras, y presenta una tasa de mortalidad alarmante: uno de cada cinco infectados no sobrevive.
El peligro de esta bacteria reside en su capacidad para evolucionar rápidamente hacia cuadros graves. Los síntomas iniciales, como fiebre, escalofríos y náuseas, pueden derivar en una septicemia, una reacción sistémica que provoca shock séptico, caída de la presión arterial y fallo multiorgánico. La rapidez con la que se desarrolla la infección exige una respuesta médica inmediata.
Vibrio vulnificus habita en aguas cálidas y saladas, contaminando moluscos y mariscos filtradores. La vía principal de transmisión es la ingestión de estos productos sin cocción adecuada. Por ello, los expertos insisten en la necesidad de extremar las medidas de higiene y cocinado, especialmente en zonas costeras donde la bacteria prolifera con mayor facilidad.
Los grupos más vulnerables incluyen personas mayores, pacientes inmunodeprimidos, individuos con enfermedades hepáticas crónicas, niveles bajos de ácido gástrico o hemocromatosis. Para ellos, el riesgo de desarrollar complicaciones graves es considerablemente mayor.
La prevención se convierte en la herramienta más eficaz: evitar el consumo de marisco crudo, cocinar adecuadamente los productos marinos y mantener una manipulación higiénica son pasos esenciales. Ante cualquier síntoma tras la ingesta, se recomienda acudir de inmediato a un centro médico.
El mensaje de los profesionales es contundente: la detección precoz y el tratamiento rápido pueden salvar vidas. La prudencia en el consumo de marisco y la atención a los primeros signos de infección son claves para evitar consecuencias fatales.