Turismo
Alquilaron un piso turístico para un mes en San Sebastián y se fueron a los 10 días: "La ciudad no es lo que esperábamos"
Expectativas vs. realidad: Una estancia truncada por el turismo masivo
Un matrimonio francés que había alquilado un apartamento en San Sebastián para pasar un mes decidió marcharse a los diez días de su llegada. La pareja, que había elegido un piso cercano a la Playa de laConcha, reconoció que la experiencia no fue la esperada y que la estancia resultó mucho más corta de lo previsto. “Viajar en junio no fue la mejor idea, estaba todo demasiado lleno”, explicaron en declaraciones a Business Insider. Su idea inicial era aprovechar la ciudad durante semanas, recorriendo con calma sus barrios, playas y atractivos turísticos, pero pronto comprendieron que “con tres o cinco días habría sido suficiente” para conocer lo esencial sin llegar a sentirse agobiados.
El principal motivo de su marcha fue la saturación turística propia de los meses de verano. “La ciudad estaba demasiado llena en verano y eso nos impidió disfrutar con tranquilidad”, contaron. Las playas abarrotadas, las colas para acceder a los lugares más visitados y la falta de espacio para moverse con comodidad les hicieron ver que un mes resultaba excesivo en esas condiciones. “Entre las playas abarrotadas, las colas para entrar en los lugares más visitados y la falta de espacio para movernos a gusto, pronto sentimos que un mes era excesivo”, relataron.
La decisión de regresar a París supuso asumir un coste económico importante, ya que el alquiler no fue reembolsado por la plataforma. Aun así, aseguraron que prefirieron perder el dinero antes que prolongar unas vacaciones que no estaban disfrutando como esperaban. “Preferimos volver a casa que seguir aquí sin disfrutar”, señalaron, dejando claro que no se trató de una decisión improvisada, sino de una conclusión a la que llegaron después de varios días sintiéndose incómodos. También admitieron que parte del error estuvo en la preparación del viaje: “No investigamos lo suficiente antes de reservar tanto tiempo”, reconocieron.
La pareja admitió que “elegir junio para viajar a San Sebastián no fue un acierto”, ya que coincidió con la época de mayor afluencia turística y eso condicionó toda la experiencia. Según explicaron, “en meses como la primavera o el otoño la ciudad probablemente se recorra con más calma y permita vivir una experiencia más auténtica y cercana a lo que buscábamos”.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística, San Sebastián recibe cada verano un incremento significativo de visitantes, lo que se traduce en una mayor ocupación hotelera y en una presión evidente sobre las playas y los principales puntos de interés de la ciudad.