Salamanca

Fran Vicente: «Si hubiera repesca iría a ganar»

El chef salmantino se atrevió con la culinaria japonesa y mexicana
El chef salmantino se atrevió con la culinaria japonesa y mexicanalarazon

Octavo expulsado de «Top Chef» cocinó para LA RAZÓN y habló de su futuro

Incluso después de su expulsión en el programa de la semana pasada del concurso culinario de Antena 3 «Top Chef», el cocinero Fran Vicente es perseguido por la calle por los espectadores del espacio, que quieren expresarle que su salida «ha sido complicada para ellos porque nadie se la esperaba». LA RAZÓN ha estado con él viviendo su último reto en el arte culinario: enfrentarse a dos chefs en sendas cocinas diferentes. El lugar elegido para el desafío fue el restaurante La Embajada (Juan Bravo, 43, Madrid), un espacio muy especial que permite a sus clientes disfrutar de tres ambientes diferenciados: un restaurante mexicano, uno mediterráneo y otro japonés, además de un gastro bar y una coctelería; los contrincantes en el reto: Ernesto Diomar Cruz, en la parte mexicana, y Sergio Hernández, para la japonesa.

Unos panuchitos de cochinita pibil fueron los elegidos para el mexicano. «Es un plato maya que significa ‘‘bajo tierra’’; se llama así porque la carne se envuelve, se mete en un horno y se deja macerar bajo tierra durante una noche antes de cocinarse», comenta Diomar Cruz. «Me gustan esos picantes y sabores. Son técnicas muy antiguas que todavía se siguen llevando a cabo y que cada día evolucionan, más profesionales las pulen y consiguen transmitirlas a la alta cocina», dice Fran Vicente.

Compañeros en contra

En el plano japonés, «he hecho un plato de atún con una costra de sésamo negro, le hemos puesto un poquito de alga, es muy fresco, y aporta la posibilidad de presentarlo de muchas formas», apunta el chef. Afirma que le gusta aprender a preparar de todo, «un cocinero siempre está instruyéndose, hasta después de jubilarse. Donde crees que no te puede aportar nada, al final es donde más te llama algo la atención», pero a pesar de esta incursión en cocinas de otros países aclara que «mi favorita es la española. Creo que tenemos suficientes productos y grandes cocineros que nos regalan sus técnicas para poder poner un pellizquito de toda la gastronomía de nuestro país en la cocina. Es muy interesante y no hace falta irte muy lejos para probar un gran plato».

Tras su marcha del programa el lunes con el escalofriante «coge tus cuchillos y vete» de la boca de Alberto Chicote, su mundo no ha dejado de girar. «Es cierto que ahora te conocen un poco más allá de tu barrio en Salamanca, pero mi vida es aprender, cocinar y seguir formándome», afirma Fran. «Sientes un poco de tristeza, a la vez impotencia de no haber llegado a la meta, que en ese momento era pasar esa prueba». Y es que pone mimo y detalle en cada plato que hace; este joven cocinero es exactamente el mismo tanto dentro como fuera del programa, quizá por dicho motivo su repentina expulsión – para nada esperada por el público, ya que desde las primeras emisiones se postuló como uno de los favoritos– esté levantando ampollas.

También nos desveló cómo es el ambiente entre los compañeros que quedan dentro del concurso. «Hay que separar un poco el programa de lo personal, y la convivencia va un poco según el día: unos nos llevamos mejor y otros parece que un compañero va más en contra tuya». De hecho, «yo estoy a favor de la estrategia y sí creo que algunos me han votado para eliminarme porque creían que era uno de los más fuertes». En el caso de su expulsión, Vicente se siente apoyado: «La gente que me sigue piensa que no ha estado bien, lógicamente es televisión y sé lo que es. Hay que afrontarlo y pensar que es así: mi plato era peor que el de mi compañera Inés y me he ido yo». Si se diera la posibilidad de una vuelta a las cocinas de «Top chef», el salmantino lo tiene claro: «Lucharía a tope otra vez, como cuando entré al principio, para intentar ganar y llegar a la meta».