Si tienes este apellido y eres de Madrid, tienes antepasados sefardíes

Los sefardíes son los judíos descendientes de la comunidad judía que vivió en la península ibérica (lo que hoy es España y Portugal) hasta su expulsión en 1492 por los Reyes Católicos y en 1497 por el rey Manuel I de Portugal. Esta comunidad se caracterizaba por una rica cultural, lingüística y religiosa que ha perdurado a lo largo de los siglos.

Durante la Edad Media, la comunidad judía en la península ibérica experimentó un período de florecimiento cultural y económico, conocido como la "Edad de Oro". Durante este tiempo, los judíos sefardíes disfrutaron de un alto grado de integración en la sociedad, contribuyendo significativamente a la ciencia, la filosofía, la medicina, la literatura y el comercio.

La situación cambió dramáticamente con la Reconquista cristiana y la posterior unificación de España bajo los Reyes Católicos. En 1492, la promulgación del Edicto de Granada forzó a los judíos a convertirse al cristianismo o a abandonar el país. Muchos optaron por el exilio, esparciéndose por el Mediterráneo, el Imperio Otomano, el Norte de África, y otras partes de Europa.

En Portugal, una situación similar ocurrió en 1497 cuando el rey Manuel I ordenó la conversión forzada de los judíos o su expulsión. Aquellos que se convirtieron al cristianismo, ya sea en España o Portugal, fueron conocidos como "conversos" o "marranos". Sin embargo, muchos continuaron practicando el judaísmo en secreto.

La herencia de los apellidos: estos son los más comunes

Uno de los legados que los judíos han dejado en la sociedad son los apellidos. En España, muchos apellidos tienen su origen en el pueblo sefardí. Sin embargo, el hecho de tener un apellido sefardita no siempre es garantía de tener sangre judía. Muchos de los apellidos fueron adoptados por los judíos conversos que se quedaron en España.

• A: Abraham, Acevedo, Acosta, Aguado, Aguiar, Aguilar, Alarcón, Alba, Aldana, Alcalá, Alegre, Alfonso, Alfaro, Almeida, Alonso, Álvarez, Amigo, Amado, Amaya, Aranda.
• B: Baltasar, Báez, Barral, Barrios, Beato, Benavente, Benítez, Bernal, Bravo, Bueno, Bermejo.
• C: Cabrera, Calvo, Camacho, Campo, Cantos, Carrasco, Carrillo, Carvajal, Castellanos.
• D: Delgado, Diego, Díez, Díaz, Duque, Domínguez, Durán, Dorado, Duarte.
• E: Enrique, Enríquez, Espejo, Esperanza, Espinosa, Escudero, Esteban.
• F: Fajardo, Fernández, Ferrer, Ferrero, Figueroa, Flores, Fuentes, Fuertes.
• G: Gálvez, García, Gato, Garzón, Gil, Gimeno, Giménez, Gómez, Granado, González, Gutiérrez.
• H: Haro, Henríquez, Hernández, Heredia, Holgado, Herrera, Huerta, Hurtado.
• I: Ibáñez, Israel, Izquierdo.
• J: Jaén, Jiménez, Jimeno, Jorge, Juárez, Julián.
• L: Lázaro, Leal, Lara, Larios, Leiva, León, Lima, Linares, Lobato, Lobo, López, Lorca, Lorenzo.
• M: Madrid, Madrigal, Macías, Machado, Manuel, Márquez, Marchena, Marcos, Martínez, Marín.
• N: Nájera, Navarro, Navas, Nieto, Núñez.
• O: Ocampo, Ochoa, Olivos, Olmos, Oliva, Ordóñez, Olivares, Orellana, Ortega, Ortiz.
• P: Pacheco, Padilla, Palma, Palomino, Pardo, Paredes, Pareja, Parra, Paz, Pascual, Pedraza, Pena, Pérez.
• Q: Quirós, Quemada.
• R: Ramírez, Ramos, Real, Rey, Reina, Ribera, Ricardo, Rivero, Robles, Roca, Rivas, Rodríguez, Ruiz.
• S: Salgado, Salinas, Salas, Salazar, Salcedo, Salvador, Sánchez, Sancho, Serra, Serrano, Sierra, Silva.
• T: Talavera, Toledo, Torre, Torres, Trigo.
• U: Úbeda, Uría, Urrutia.
• V: Valero, Valle, Vara, Varela, Vargas, Vázquez, Vega, Velázquez, Vera, Vergara, Villanueva, Vidal.
• Z: Zalazar, Zaragoza, Zúñiga.

Cultura y tradiciones de los sefardíes

Una de las características más distintivas de los sefardíes es su lengua, el ladino o judeoespañol, una lengua romance que conserva muchos elementos del español medieval. En cuanto a la religión, los sefardíes mantienen tradiciones religiosas que se distinguen de las de los judíos asquenazíes (judíos de Europa Central y del Este). Sus prácticas litúrgicas, canciones religiosas (piyutim). Sus costumbres festivas reflejan influencias de su historia en la península ibérica y de las tierras de acogida.

La gastronomía sefardí es una rica mezcla de sabores mediterráneos y recetas tradicionales que han pasado de generación en generación. Platos como la adafina (un estofado cocido lentamente), el borekas (empanadas rellenas) y el pastel de almendras son solo algunos ejemplos de su variada cocina.