Investigación

Desvelan la causa de la alta incidencia en Europa del alzhéimer y la esclerosis múltiple (EM)

La han encontrado en el ADN de huesos y dientes antiguos de 5.000 humanos, que también ha revelado por qué los europeos del norte son más altos que sus homólogos del sur

200 veces suele leerse el ADN de un virus para su análisis, de este virus solo se han conseguido 7
Un técnico de laboritorio analizando ADNGonzalo Pérez MataLa Razón

El aumento de las incidencia de enfermedades neurodegenerativas está estrechamente relacionado con el envejecimiento de la población. Por ello parece lógico que Europa sea el contiente donde se registran cifras más elevadas de afectados por patologías debilitantes como el alzhéimer o la esclerosis múltiple (EM).

Cerca de 8 millones de personas viven con algun tipo de demencia en la Unión Europea (los 27), una cifra que se eleva hasta los casi 10 millones si se incluyen todos los países europeos, según el Informe de Alzheimer Europe. Respecto a la esclerosis múltiple (EM), en el continente europeo vive algo menos de la mitad (1,2 millones) de las personas que padecen esta enfermedadd en el mundo (3 millones). También hay diferencias importantes en la incidencia según la geografía: en concreto, el doble de casos de esclerosis múltiple por cada 100.000 personas en el noroeste de Europa, incluidos Reino Unido y Escandinavia, en comparación con el sur.

Diversas investigaciones habían evidenciado que la EM, por ejemplo, es más común en personas blancas de ascendencia europea, pero hasta ahora no se había analizado en profundidad las causas de la elevada incidencia de estos dos trastornos debilitantes en Europa. Ahora, un extenso trabajo, concretado en cuatro artículos de investigación pioneros publicados en el mismo número de la revista Nature, proporciona una nueva comprensión biológica de este fenómeno. Los investigadores llaman a su descubrimiento "un salto cuántico" en la comprensión de la evolución de la enfermedad.

El trabajo ha sido realizado por un gran equipo internacional dirigido por el profesor Eske Willerslev de las Universidades de Cambridge (Reino Unido) y Copenhague (Dinamarca), el profesor Thomas Werge, de la Universidad de Copenhague, y el profesor Rasmus Nielsen, de la Universidad de California, Berkeley (Estados Unidos), y ha contado con contribuciones de 175 investigadores de todo el mundo.

Una adaptación para sobrevivir

Los científicos crearon el banco de genes humanos antiguos más grande del mundo analizando los huesos y dientes de casi 5.000 humanos que vivieron en Europa occidental y Asia hasta hace 34.000 años. Al secuenciar ADN humano antiguo y compararlo con muestras modernas, el equipo internacional de expertos trazó un mapa de la propagación histórica de genes (y enfermedades) a lo largo del tiempo a medida que las poblaciones migraban.

Así, pudieron identificar que los genes que aumentan el riesgo de EM entraron en el noroeste de Europa hace unos 5.000 años, a través de una migración masiva de un grupo de pastores de ganado llamado Yamnaya, que se movieron desde el sur de los montes Urales hacia el noroeste de Europa.

En concreto, portar los genes que hoy se sabe que predisponen a padecer EM era una ventaja de supervivencia en ese momento, ya que protegía a los antiguos agricultores de contraer enfermedades infecciosas en sus ovejas y ganado. A este respecto, Eske Willerslev, de las Universidades de Cambridge y Copenhague y Fellow del St John's College, experto en análisis de ADN antiguo y director del proyecto, señaló que "estos resultados cambian nuestra visión de las causas de la esclerosis múltiple y tienen implicaciones para la forma en que se trata".

En esta línea, el profesor Lars Fugger, coautor del estudio sobre la EM y médico consultor del Hospital John Radcliffe de la Universidad de Oxford (Reino Unido), añadió: "Esto significa que ahora podemos comprender y tratar la EM tal como es en realidad: el resultado de una alteración genética como resultado a la adaptación a ciertas condiciones ambientales que ocurrieron en nuestra prehistoria".