Embarazadas y bebés de Melilla, en riesgo por la falta de obstetras

La atención sanitaria de Ceuta y Melilla lleva un año siendo "tercermundista". Las dos ciudades autónomas, las únicas de España cuya gestión sanitaria depende directamente del Estado –a través del Instituto de Gestión Sanitaria (INGESA), dependiente del Ministerio de Sanidad–, están viviendo carencias endémicas a las que nadie pone solución: falta de médicos de todas las especialidades, agotamiento de las plantillas y listas de espera imposibles. Los médicos de Melilla se han visto en tal tesitura límite que para velar por la seguridad de sus pacientes, les recomiendan que se marchen a otras comunidades autónomas.

Este es el caso de ginecólogos y obstetras, las especialidades que viven la situación más precaria. En unos días, el 1 de marzo, el servicio se quedará con sólo 5 facultativos, de los cuales uno está de baja, y esto hará inviables las guardias físicas. Por ello, están aconsejando a sus pacientes embarazadas que se trasladen a Málaga a partir de la semana 32 ya que, en el caso de que algo se complique, en el embarazo o en el parto, no está asegurado que vayan a recibir en Melilla una atención sanitaria de calidad.

Como explica el colegio de médicos de la ciudad autónoma en una carta hecha pública el pasado viernes, "dada la situación, se abordaron soluciones con la dirección del hospital (Comarcal), como traer profesionales de refuerzo para hacer las guardias y liberar a la plantilla localizada en Melilla, como se ha hecho en otros servicios, pero por ahora la dirección central del Ingesa en Madrid no lo ha aprobado. Lo preocupante es que esta situación crítica se adelantó hace más de un año, porque se supera el número legal de horas trabajadas –certificado por Inspección de Trabajo– pero siguen sin llegar las soluciones".

Otra situación extrema se está produciendo en el área de Cardiología del hospital, donde no hay unidad de Hemodinámica. Esto significa que los pacientes que sufren un infarto o un ictus no tienen acceso a una terapia que protege el corazón de los daños, la angioplastia primaria."Los sanitarios y la población de Melilla son tratados como ‘de tercera’. Es increíble que a la ministra de Sanidad se le llene la boca hablando la defensa de la equidad mientras deja que esto suceda», señala Tomas Toranzo, presidente de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (Cesm). «Se está infringiendo toda la normativa laboral. Ha habido denuncias de la inspección de trabajo, la huelga médica más larga de España (11 meses) –y ni siquiera se han reunido con el comité de huelga– han pedido ayuda al Defensor del Pueblo, a Europa…», añade.

Ultimátum al Ingesa

En este contexto de inacción, el Colegio de Médicos de Melilla ha dado un ultimátum al Ingesa: o se toman medidas o volverán a la huelga a partir de marzo. Ayer se cumplió un mes desde que los facultativos de Ceuta y Melilla decidieron dar una tregua, ante la predisposición de la ministra de Sanidad, Mónica García, para resolverla. Pero eso era solo una actitud, que no se ha materializado en nada. "La ministra solo se ha quedado en palabras grandilocuentes", expone Toranzo.

Desesperada es también la situación de la Atención Primaria y de los Servicios de Urgencias de Melilla. En los centros de salud, por ejemplo, hay bajas sin sustitución todos los días, hasta 5 médicos en algunos casos, sobre una plantilla de entre 9 y 11. El cupo de cada médico es de hasta 60-65 pacientes al día. El Servicio de Urgencias se creó en el año 2000 con 11 médicos, y ahora sólo quedan 8. De ellos, el 65% es mayor de 60 años, y no hay posibilidad de reducción de jornada de noche. Tampoco está reconocida la turnicidad, ni las noches ni los festivos.

La plantilla de Urgencias del Hospital Comarcal está aún peor. Hay 15 facultativos fijos, pero 8 de ellos son mayores de 55 años y 1 sobrepasa la edad de jubilación. De los 8 mayores de 55, tan sólo 2 hacen guardias. De los 7 restantes, hay una baja por maternidad y otro está trabajando en la UCI. «Hagan cuentas, sólo 5 de los 15 médicos fijos hacen guardias. Otro dato sobre este servicio: en un día normal debería haber 4 médicos de mañana, 4 de tarde, 2 de noche y 1 de guardia (11 en total). Sin embargo, hay días en que apenas llegan a 7 médicos", denuncian.

De difícil cobertura, pero no imposible

El reconocimiento de Melilla y Ceuta como zonas de "difícil cobertura" en cuanto a profesionales sanitarios se incluyó en el Real Decreto 118/2023, de 21 de febrero de 2023, en el que se habilitaba a la dirección del Ingesa para "establecer las medidas necesarias que incentiven la contratación de profesionales en estos puestos". "Ha pasado un año y no se ha aplicado ni una sola medida, ni económica ni de mejoras profesionales. El Ingesa y el Ministerio de Sanidad no han hecho nada". "Nuestra sanidad está en la UCI y hay que poner los medios para reanimarla ya", evidencia el ICOMM.