Historia de España
Este territorio de España logró la independencia política durante casi dos meses: impuso su soberanía y una moneda propia
Se trata de una comunidad autónoma que durante la Guerra Civil tuvo que imponer una soberanía propia para subsistir en medio del conflicto
Los dos grandes acontecimientos que sucedieron en el año 1492, con la conquista de Granada y el descubrimiento de América, consolidaron la idea de España como ente político soberano y unificado. A raíz de entonces, nuestra nación ha vivido fuertes momentos de esplendor que han engrandecido todavía más la historia patria. Sin embargo, la disparidad de pensamientos junto a las ideologías contrarias que han surgido durante los últimos siglos han conllevado a la consecución de ciertos conflictos, incluso de carácter bélico, que, inevitablemente, han enfrentado a los españoles.
En este sentido, el caso que hoy nos concierne atañe a la pugna más conocida de la historia moderna de España, es decir, la Guerra Civil española, iniciada el 17 de julio de 1936 y concluida el 1 de abril de 1939. Durante estos casi tres años de enfrentamiento surgieron cientos de acontecimientos que han trascendido con motivo de su trascendencia a posteriori, pero otros han quedado relegados al ostracismo y su recuerdo se ha diluido. Por tanto, el incidente que hoy mencionamos se encuentra dentro de esta última sección, puesto que, pocos conocen el territorio que logró la independencia política sobre el país.
La comunidad autónoma que se independizó
Tal vez muchos puedan pensar en la proclamación de la República Catalana en abril de 1931, pero, en realidad, esta solo duró tres días y no se llegó a concretar ni en la parte política ni económica y su proliferación con el tiempo, aun recibiendo cierto apoyo social, fue nula. De esta manera, hay que visitar el norte de España para encontrar la comunidad autónoma que durante el conflicto civil hizo uso de su poder para garantizar la soberanía. Efectivamente, Asturias es el territorio del que estamos hablando. El 24 de agosto de 1937 fue la fecha donde el Consejo Interprovincial de Asturias y León proclamó la soberanía de la región.
De esta manera, el organismo gobernante es el que se conoce como el Consejo Soberano de Asturias y León que, en realidad, se concibe como una fuerza autoritaria a nivel civil y militar. A partir de entonces, el funcionamiento del territorio desempeñó sus funciones como un país autosuficiente reorganizando el gobierno regional en uno solo con una soberanía propia. Además se estableció Gijón como capital y hasta se llegó a establecer una nueva moneda propia, conocida bajo el nombre de "belarmino", que recibe el nombre del líder que encabezó el movimiento político, Belarmino Tomás.
El protagonista de esta historia era un político socialista y asumió el cargo de "presidente" junto a un gabinete conformado por partidos políticos de izquierdas. La autonomía duró un total de 57 días, casi dos meses, y contó con un sistema político debidamente estructurado que ejerció un poder severo sobre la población con toques de queda y la suspensión de derechos fundamentales. Esta fue la respuesta ante la inminente llegada de los nacionalistas que mostraron una negativa recia ante esta idea de "independencia".
La resolución del conflicto con la llegada de Franco
El 20 de octubre de 1937 finalizó la independencia asturiana con la entrada de las tropas franquistas en Gijón. Sin embargo, no solo contó con la oposición del bando nacionalista sino que el gobierno de Manuel Azaña también mostró un enfado considerable. Hoy en día la anécdota ha pasado a la historia aunque su recuerdo no se estudia en las aulas, por eso, en este instante, conviene recordarlo pese a lo que pueda parecer.