Fabri Orlandi: «Caminar es un excelente punto de partida para hacer ejercicio, pero hay que diversificar»

¿Por qué caminar es tan importante para la salud?

Caminar es una de las formas más básicas y esenciales de ejercicio que existen. No solo involucra múltiples grupos musculares, sino que también aumenta la circulación y el flujo sanguíneo, lo que favorece la salud cardiovascular. Además, caminar en la naturaleza o en parques puede proporcionar beneficios mentales, reduciendo el estrés y liberando endorfinas, que son químicos naturales que promueven el bienestar.

¿Qué tipo de caminata diaria recomienda en función de la edad y el sexo?

Si bien el tipo y la intensidad de la caminata deberían basarse más en la condición física y las metas personales que en el sexo o la edad, es cierto que, con el paso de los años, es recomendable adaptar el ritmo. Para adultos jóvenes, las caminatas rápidas o el senderismo pueden ser ideales. Para las personas mayores, una caminata constante y moderada es más apropiada.

¿Marcarse objetivos como el número de pasos tiene sentido o es mejor basarse en otra serie de factores?

Los objetivos cuantitativos, como los 10.000 pasos, pueden ser útiles como motivación. Sin embargo, la calidad de esos pasos, el terreno y la intensidad son tan importantes como la cantidad. Para alguien que busca mejorar su salud cardiovascular, por ejemplo, es vital considerar la intensidad de la caminata. Al caminar o correr, es fundamental contar con calzado adecuado para apoyar el pie y absorber el impacto. Un calentamiento adecuado puede preparar los músculos para la actividad y el estiramiento después ayuda a relajar los músculos y a reducir el riesgo de lesiones. La postura también juega un papel crucial: mantener la espalda recta y la cabeza erguida puede prevenir problemas musculares y de columna a largo plazo.

¿Es necesario compaginar el caminar con otro tipo de ejercicio o bastaría solo con esto?

Caminar es un excelente punto de partida para la actividad física, pero diversificar el ejercicio puede ofrecer beneficios adicionales. Introducir ejercicios de resistencia o flexibilidad, como yoga o pilates, puede ayudar a mejorar la fuerza muscular, la postura y la salud ósea.

¿Llevar una mala dieta echa por tierra el trabajo físico?

No se puede subestimar la importancia de una dieta equilibrada. El ejercicio puede quemar calorías y construir músculo, pero sin la nutrición adecuada, el cuerpo no tendrá los recursos que necesita para recuperarse o funcionar de manera óptima.

¿Está la población actualmente más concienciada con hacer deporte que años atrás?

Con el auge de la tecnología y la información en línea, cada vez más personas tienen acceso a recursos sobre salud y bienestar. Esta tendencia ha llevado a una mayor conciencia y participación en actividades físicas, en comparación con décadas anteriores.

¿Ha aumentado también la obsesión por tener un aspecto físico de diez? ¿Puede resultar contraproducente el ejercicio excesivo?

La obsesión por el ejercicio puede conducir a lesiones y agotamiento. Es esencial equilibrar el ejercicio con el descanso adecuado. Para la mayoría, una combinación de ejercicio cardiovascular, de resistencia y de flexibilidad distribuido en 150-300 minutos a la semana es adecuado.

Hay incluso quien en plena ola de calor es incapaz de privarse de salir a correr por la calle. ¿Puede ser peligroso hacer deporte con temperaturas altas?

Las altas temperaturas pueden aumentar el riesgo de deshidratación y golpe de calor. Si una persona toma la decisión de hacer ejercicio durante una ola de calor, es vital hacerlo temprano por la mañana o después del atardecer, beber mucha agua y usar ropa adecuada.