Más cerca de la primera vacuna contra la tuberculosis

Investigadores de la Universidad de Oxford (Reino Unido) han anunciado que la próxima semana presentarán los ensayos clínicos de una prometedora vacuna que podría demostrar su potencial para erradicar las infecciones por tuberculosis, enfermedad que causa cada año 1,4 millones de nuevos casos.

Conocida como MVA85A, la vacuna es la que más lejos ha llegado en los últimos años de un largo número de fármacos candidatos a detener la transmisión del 'Mycobacterium tuberculosis', que ha demostrado a lo largo del último siglo de investigación que puede burlar rápidamente a algunos de los tratamientos antibióticos utilizados en su contra.

"En mi opinión, (este ensayo) lo voy a considerar como un monumento histórico", dijo Peggy Johnston, responsable de los programas de la Fundación Bill y Melinda Gates en Seattle (Estados Unidos), que recuerda que si su uso es negativo supondrá un "punto de inflexión claro". "Y si es positivo, sería la primera prueba que ofrece una respuesta sólida"contra la enfermedad.

Aunque las empresas están haciendo grandes avances en desarrollo de nuevos fármacos para combatir la tuberculosis, como Johnson & Johnson, que recientmente ha lanzado al mercado el fármaco bedaquiline, los expertos creen que en última instancia una vacuna es la mejor herramienta para erradicar la enfermedad.

La vacuna MVA85A está siendo desarrollada por investigadores de la Universidad de Oxford con el apoyo de Aeras, el Wellcome Trust, la Comisión Europea y el Consorcio de la Tuberculosis Oxford-Emergent, una empresa conjunta entre Oxford y Emergent Inc BioSolutions creado para hacer la vacuna.

Es una de las 16 vacunas que están siendo estudiados en ensayos clínicos en humanos y los resultados del estudio informan del diseño de más de 50 vacunas que se están probando en ensayos preclínicos en animales.

Utilizada por primera vez en 1921, la vacuna actual, conocida como Bacilo de Calmette-Guérin (BCG) se administra de forma habitual a los bebés en los países con altas tasas de tuberculosis para prevenir la enfermedad grave.

Pero la protección desaparecía en unos pocos años y el BCG no hacía nada para proteger contra la forma más común de tuberculosis que invade los pulmones de los adultos y adolescentes, lo que hace que se pueda transmitir a través de la tos y los estornudos.

Para el estudio de etapa intermedia de MVA85A, los investigadores evaluaron a casi 3.000 bebés en Sudáfrica ya vacunados con BCG. La mitad de los bebés que recibieron la vacuna y la otra mitad recibió un placebo.

En este sentido, los autores recuerdan que la vacuna es una versión modificada de un virus de la viruela que han "arrancado de sus entrañas", por lo que es inofensivo a pesar de ser capaz de provocar una respuesta inmune.

Luego, los investigadores añadieron un componente de bacterias de la tuberculosis a entrenar al sistema inmune a combatir las infecciones. Si la prueba tiene éxito, se procedería a la fase 3 de un estudio más amplio serán necesarios antes de que pueda ser objeto de licencia.