Psicología
Silvia Severino, psicóloga: “Si alguien se está preparando para dejarte, siempre aparecen estas tres señales”
Las rupturas hay veces que parece que ocurren de un día para otro. Sin embargo, cuando una persona empieza a desconectarse de la relación, su comportamiento suele mostrar cambios que pueden pasar desapercibidos
En las consultas de psicología, algunas de las preguntas más frecuentes giran en torno a la incertidumbre del fin de una relación: ¿por qué acabó así? ¿cómo saber si una relación está llegando a su final? Aunque cada pareja funciona con sus propios códigos, existe un patrón psicológico bien estudiado que se repite cuando uno de los miembros comienza a distanciarse emocionalmente. Esa es, precisamente, la idea central del vídeo que la psicóloga y divulgadora Silvia Severino publicó recientemente, donde explica que ciertos comportamientos anticipan una ruptura antes de que esta se formalice.
La psicología de las relaciones señala que las rupturas no suelen producirse de manera repentina. El proceso interno de desvinculación, lo que popularmente se conoce como “desconectarse”, puede prolongarse semanas o incluso meses antes de que la decisión de romper se haga explícita. Esto encaja con la perspectiva divulgada por Silvia Severino, quien afirma que cuando alguien ya está pensando en marcharse, existen señales claras que emergen casi siempre en un orden similar.
“Cuando alguien se está preparando para dejarte, siempre aparecen estas tres señales y casi siempre en el mismo orden”, afirma la psicóloga al inicio de su vídeo. Su mensaje, directo y sintético, resume un proceso que muchos experimentan sin saber interpretarlo.
Tres señales de que alguien está preparándose para dejar una relación
1. El humor cambiante: la primera grieta
El primer indicio descrito por Severino es la inestabilidad emocional. “Uno: humor cambiante. Un día frío, al día siguiente amable. No es por lo que hiciste, es que ya empezó a desconectarse, pero aún no se atreve a irse”, sostiene.
Este vaivén puede responder a un conflicto interno: la persona no se siente plena en la relación, pero tampoco está preparada para dar el paso definitivo. Esa tensión interna genera comportamientos contradictorios que confunden a la pareja y alimentan la sensación de incertidumbre.
2. Distancia emocional y descompensación del esfuerzo
La segunda señal supone un avance claro en el proceso de distanciamiento: la retirada emocional. “Dos: se aleja emocionalmente. Hablan menos y tú empujas la relación. Y esa persona solo deja que te caiga la relación”, explica la psicóloga en su vídeo.
Es una dinámica muy estudiada en terapia de pareja: cuando el equilibrio del esfuerzo se rompe, una parte empieza a cargar el peso del vínculo. Según investigaciones publicadas en Journal of Social and Personal Relationships, cuando una persona deja de invertir emocionalmente, suele hacerlo de forma progresiva. No siempre hay una conversación explícita: simplemente disminuye la comunicación, el interés y los pequeños gestos cotidianos que antes sostenían la relación.
Para Silvia Severino, esta retirada no se debe tanto al deseo de hacer daño como al intento de evitar responsabilidad: “No rompe porque no quiere quedar como el malo ni asumir esa responsabilidad. Espera que tú te canses primero”. Es una estrategia pasiva que, aunque común, genera un desgaste importante en la otra parte.
3. La culpa como última herramienta para justificar la salida
La tercera señal está vinculada al conflicto. Cuando la ruptura ya es inminente, según Severino, surge un patrón de reproches: “Tres: te culpa de todo. Cuando intentas hablar, te dice que exageras, que agobias, que ya no puede más. Ese conflicto que provoca es justamente el que utilizará para justificar su salida”.
Este mecanismo psicológico, conocido como externalización de la responsabilidad, es común en rupturas donde uno de los miembros no quiere asumir el peso de la decisión. Diversos estudios sobre comunicación en pareja recogen que generar discusiones o sobredimensionar tensiones previas es una de las formas más habituales de construir un relato que legitime la separación.
Un mensaje para aprender y prevenir
El vídeo de Severino concluye con una intención: ofrecer herramientas para identificar patrones que muchas personas normalizan hasta que la ruptura se materializa. Aunque sus consejos son útiles como guía general, los profesionales insisten en que cada relación tiene su contexto y que, ante la duda, buscar apoyo psicológico puede ayudar a interpretar lo que está ocurriendo sin caer en conclusiones precipitadas.
Comprender estas señales no garantiza evitar una ruptura, pero sí puede aportar claridad en momentos de incertidumbre y fomentar relaciones más conscientes, comunicativas y equilibradas.