Dos millones y medio fueron a los toros, ¿mucho o poco?
El Gobierno necesita ruido, mucho, mucho ruido. Y quién soy yo para criticárselo. No aprendemos. Entramos siempre al trapo
El Gobierno necesita ruido, mucho, mucho ruido. Y quién soy yo para criticárselo. No aprendemos. Entramos siempre al trapo