Inteligencia ARtificial
El ex-CEO de Intel defiende una IA cristiana: “Mi misión es crear una IA que acerque la segunda venida de Cristo”
Pat Gelsinger ha sorprendido al mundo tecnológico con una nueva misión: desarrollar una inteligencia artificial alineada con los valores cristianos
En un momento en el que la tecnología vive su punto álgido y la fe experimenta un resurgimiento en el interés social, quizá haya que replantearse si Silicon Valley aspira a convertirse en un nuevo lugar de culto. Eso es, al menos, lo que parece perseguir Pat Gelsinger, ex-CEO de Intel, tras verse obligado a dimitir y ser demandado por los accionistas.
En marzo de 2025, apenas unos meses después de dejar Intel, Gelsinger asumió la dirección de una empresa tecnológica llamada Gloo, cuya misión declarada es difundir valores cristianos en Silicon Valley e incluso en el Congreso de Estados Unidos, respaldada por una campaña de financiación de 110 millones de dólares.
Su campo de acción (o “intención misionera”) no termina ahí: también promueve unaIA alineada con los valores cristianos dentro de lo que él denomina el “ecosistema de la fe”, cuyo catálogo incluye una especie de Salesforce para iglesias, además de chatbots y asistentes de IA destinados a automatizar tareas pastorales y labores de apoyo ministerial.
La plataforma con la que Gelsinger quiere convertir Silicon Valley
En un seminario organizado a principios del mes pasado por Gloo, la Universidad Cristiana de Colorado (una institución de corte conservador) y el Christian Post (un medio evangélico conservador), Gelsinger describió el desarrollo de la IA como un momento trascendental para la religión comparable a la invención de la imprenta por Gutenberg.
“La Iglesia adoptó aquel gran invento de su época para cambiar literalmente a la humanidad”, dijo en referencia a la imprenta. “Así que mi pregunta hoy es: ¿vamos a adoptar y moldear la IA como una tecnología que realmente llegue a convertirse en una poderosa encarnación de la Iglesia y en la expresión de la Iglesia?”
El seminario tampoco estuvo exento de polémica: uno de los participantes aseguró haber logrado que el nuevo modelo de lenguaje de Gloo (aún no lanzado públicamente) generara una receta de metanfetamina. Otro de los momentos más comentados se produjo cuando un asistente planteó la idea de crear un bot de IA basado en Charlie Kirk que ofreciera “respuestas basadas en las Escrituras”.
Gelsinger, por su parte, insiste en que no pretenden adoptaruna postura teológica fija, sino crear una plataforma lo bastante flexible como para que distintas denominaciones(luteranos, episcopalianos, católicos o las Asambleas de Dios) puedan utilizarla sin conflicto.
Si bien es cierto que la iniciativa de Gloo aún no ha captado la atención de Silicon Valley de forma significativa, proyectos como este apuntan a un futuro en el que la industria tecnológica no solo aspira a influir en cómo vivimos, sino también en aquello en lo que confiamos.