“Fersay tiene una total orientación hacia el cliente”

¿Cuáles son los orígenes de Fersay?

Fersay nace en 1979 como un pequeño servicio técnico de 40 m² en la localidad de Alcalá de Henares. En aquel año, dos jóvenes estudiantes decidieron poner en marcha su propio negocio y comenzar a reparar vídeos, televisiones y otros aparatos de la época.

Y de ahí a la distribución…

Así es. Poco a poco, comenzaron a tener un pequeño remanente de piezas que vendían a vender a otros servicios técnicos hasta que dieron el salto para dedicarse de lleno a la distribución de piezas para productos electrónicos de gama marrón. Con la aparición de nuevas tecnologías en esta gama y la bajada de precios de estos aparatos, la empresa decidió embarcarse en el campo de los repuestos de gama blanca (electrodomésticos) y dio un un giro de 180º al negocio. Ahí fue cuando Fersay fue ampliando nuevas gamas de producto e incrementando su cartera de clientes, que son los que han hecho posible que la compañía sea la empresa que es hoy.

¿Con qué estructura cuentan actualmente?

La central madrileña de Fersay cuenta con 12.000 m² donde se alojan mas de 150.000 referencias. Además, tenemos otras dos delegaciones: una en Alicante –que cubre la zona del Levante y Baleares– y otra en Tenerife, que se ocupa de la distribución a las islas Canarias y Marruecos.

¿En qué mercados están presentes?

El 80% del negocio actual está centrado en clientes profesionales como los servicios técnicos, las tiendas de electrodomésticos o las ferreterías, pero también hacemos venta online a cliente final desde la delegación alicantina, donde damos la opción de recogida en tiendas asociadas a nuestra marca. En el año 2011 nos lanzamos a franquiciar nuestro modelo de negocio y actualmente tenemos 18 franquicias, 45 corners y más de 5.500 clientes profesionales que se abastecen de nuestros productos.

¿Cuál es la oferta de productos que ofrecen al mercado?

Nuestro catálogo está formado por repuestos, consumibles y accesorios para electrodomésticos de las principales marcas del mercado, recambios para electrónica y una pequeña gama de unos 300 productos con marca propia de pequeño aparato electrodoméstico y accesorios. En esto último vamos con ventaja, porque al venir del mundo del repuesto no solo seleccionamos muy bien los productos que vamos a traer, sino que siempre tenemos disponibilidad de sus recambios y accesorios durante muchos años para garantizar la vida útil del aparato y contribuir a su vez con el medio ambiente.

¿Compra lo mismo un cliente profesional que un cliente particular?

No, el técnico puro y duro compra sobre todo repuestos que necesitan intervención técnica, mientras que el cliente final compra productos o accesorios que no necesitan intervención técnica, como puede ser un cajón de un frigorífico, un botellero, un cesto de lavavajillas, una bolsa de aspiradora, una cuchilla para un robot de cocina, un mando a distancia, baterías, soportes para televisores...

¿Cómo definirían la filosofía de trabajo de la firma?

La filosofía de trabajo de Fersay siempre se ha basado en la orientación total al cliente, respetando los cinco significados internos de la marca, cuyas iniciales conforman su nombre: futuro, excelencia, responsabilidad, solidaridad, análisis y compromiso.

¿Qué elementos diferencian a Fersay de sus competidores?

Solo tenemos competidores por gamas de producto, pero siempre nos ha diferenciado el amplio stock que tenemos en nuestros almacenes y la extrema agilidad a la hora de servir al cliente. Desde los comienzos de la empresa, Fersay suministra los pedidos en menos de 24 horas en cualquier punto de España y Portugal. Eso solo es posible anteponiendo nuestro esfuerzo profesional al personal e intentando que no decaiga el entusiasmo con el que siempre hemos trabajado y que nos ha permitido llegar a la excelencia. Todo lo que hacemos está impulsado por valores como el compromiso, la ética, la humildad, la solidaridad y la superación.

¿Es posible continuar evolucionando e innovando en un sector como este?

Por supuesto. Si hablamos de productos, es un mercado muy amplio y cada día salen modelos nuevos de aparatos así que, en ese aspecto, no hay límites. Respecto a tipos de clientes, parece sorprendente pero después de 41 años en el mercado, todos los meses tenemos clientes profesionales nuevos que nos compran. En el consumidor final, el crecimiento es infinito, porque cada vez son más los clientes que encuentran por Internet el recambio o accesorio que necesitan en nuestra página web, ya sea para pedirlo a domicilio o para recogerlo en su punto Fersay más cercano.

¿Qué valoración hace Fersay de un año tan complejo como el 2020?

Ha sido un año donde las emociones han formado parte de nuestro día a día y al final, todo influye. Por un lado, hemos tenido la suerte de ser actividad esencial (por la parte de clientes con servicio técnico); por otro, el resto de clientes ha tenido que estar cerrado bastante tiempo, así que lo definiría como un cúmulo de circunstancias imprevisibles que han hecho cambiar nuestro modo de ver la vida, el trabajo y la manera de hacer las cosas. Este año hace que valoremos el trabajo y la importancia que tienen las cosas bien hechas a largo plazo.

¿Cuáles son los retos de futuro de la empresa?

Fersay es una empresa familiar que siempre buscará lo mejor para sus empleados. Desde el inicio se han reinvertido el 100% de los beneficios con el único objetivo de crear una empresa sólida y con futuro. ¿Retos nuevos? ¡miles! Cada día buscamos mejorar, evolucionar, seguir formándonos y, sobre todo, que los nuevos proyectos en los que nos embarquemos, los hagamos bien y con los pies en la tierra. Siempre hemos pensado que cuanto más rápido se crece, más rápido se cae, así que preferimos ir poco a poco, conservar ese espíritu familiar que tenemos y hacer cosas nuevas que nos ayuden a crecer, a ser mejores personas y a crear mejores profesionales que sientan la marca Fersay como parte de sus vidas. En 2014 creamos el proyecto azelera para una potente formación interna de la plantilla y para formar gratuitamente a nuestros clientes, sus empleados y a pequeños empresarios y comercios que podamos ayudar.

¿Un deseo para 2021?

Que las pocas cosas buenas que ha traído la pandemia hayan cambiado nuestra lista de prioridades y sepamos valorar lo que realmente es importante para cada uno de nosotros.