Tecnología militar
Así es YKJ-1000, el misil hipersónico barato de China: guiado autónomo, maniobras evasivas y capacidad de enjambre a 8.600 km/h
El misil, fabricado por una empresa aeroespacial privada, habría entrado ya en fase de producción
Una empresa aeroespacial privada china ha captado la atención del sector de defensa internacional tras anunciar el inicio de la producción en masa de un misil hipersónico de bajo coste y altas prestaciones. Lingkong Tianxing Technology, con sede en Pekín, difundió este martes un vídeo en el que se muestra el misil YKJ-1000 en pleno vuelo, incluyendo secuencias reales del impacto contra un objetivo en un campo de pruebas desértico. La compañía afirma que el arma ya se fabrica a gran escala a un coste muy inferior al de los sistemas tradicionales.
Según ha declarado un representante de la empresa al South China Morning Post (SCMP), el misil tendría un precio equivalente a 'solo una décima parte del coste de los misiles tradicionales'.
Así es el YKJ-1000
El YKJ-1000 ofrece un alcance estimado de entre 500 y 1.300 km y puede alcanzar velocidades de Mach 5 (6.174 km/h) a Mach 7 (8.643 km/h), con hasta seis minutos de vuelo propulsado. Su lanzador adopta el formato de un contenedor de transporte estándar, lo que facilita su movilidad y su discreción tanto en tierra como en el mar.
Según el medio de defensa Army Recognition, el YKJ-1000 utiliza una arquitectura boost-glide, en la que un cohete de combustible sólido impulsa al vehículo hasta velocidad hipersónica antes de liberar un planeador. Este segmento planeador está provisto de un motor secundario que le permite efectuar maniobras evasivas en fases avanzadas del recorrido, antes de pasar al planeo puro. Esta combinación dificulta su interceptación, ya que el misil puede cambiar de trayectoria a gran velocidad y mantener un perfil de vuelo menos predecible que el de un misil balístico convencional.
Dentro del catálogo de misiles hipersónicos de China, el YKJ-1000 se sitúa, en alcance, por debajo del DF-17 (1.800 - 2.500 km), del YJ-21 (1.000 - 1.500 km) y del CJ-1000 de ultra largo alcance (6.000 km), pero aspira a ser el hipersónico de uso masivo.
En el vídeo difundido por la empresa, el camión que aloja el lanzador despliega patas estabilizadoras antes del disparo. Las secuencias animadas muestran al misil navegando de forma autónoma, ajustando su trayectoria durante el vuelo y realizando maniobras evasivas, mientras que las imágenes reales recogen un picado final pronunciado seguido de un impacto confirmado.
Otra parte del vídeo representa una formación de ocho misiles dirigiéndose hacia Japón de forma coordinada, destacando diferentes zonas de posibles impactos dentro del alcance del sistema.
El representante de la empresa señala al SCMP que el misil 'no requiere un vehículo de lanzamiento especializado y puede desplegarse desde plataformas móviles, incluidas las marítimas'.
Según la compañía, el sistema está concebido para realizar 'ataques rápidos y de precisión contra objetivos de alto valor situados en lo más profundo del territorio enemigo' y también puede desempeñar misiones de reconocimiento de alta velocidad gracias a sus sensores avanzados.
La empresa sostiene que su modelo de producción refleja un cambio de paradigma en los sistemas de defensa a escala global, que estarían pasando de programas 'de largo ciclo, alto coste y elevada especialización' a enfoques 'de bajo coste, gran escala y capacidades autónomas'.
Estados Unidos, por su lado, sigue avanzando en programas hipersónicos multimillonarios liderados por grandes contratistas y también tiene en desarrollo programas de misiles hipersónicos de bajo coste. Sin embargo, propuestas como el Blackbeard de Castelion aún no han llegado a la fase de producción.
Habrá una 'versión inteligente' con IA y capacidades de enjambre
Lingkong Tianxing afirma que su enfoque se apoya en chips de grado automoción, materiales de uso civil y cadenas de suministro ya consolidadas a escala masiva. Según un representante, 'al emplear componentes fácilmente accesibles y materiales de construcción civiles, hemos conseguido reducir los costes a solo una décima parte de los programas convencionales'.
La empresa asegura haber desarrollado un ecosistema propio que abarca la propulsión, la aerodinámica, los sistemas de control y la protección térmica y sostiene que dispone de las certificaciones militares chinas correspondientes.
Además del misil básico, la compañía pretende desarrollar una 'versión inteligente' que incorpore inteligencia artificial y capacidades de coordinación en enjambre.
Pese al vídeo y a las afirmaciones de la empresa, muchos aspectos del sistema siguen sin confirmación independiente y no se conocen datos verificados sobre la carga útil, la precisión real ni el grado de integración del misil en las fuerzas armadas chinas. Tampoco hay evidencias públicas de que las maniobras mostradas en las animaciones se correspondan con capacidades plenamente operativas. En conjunto, el YKJ-1000 apunta a un diseño prometedor, pero lo que se conoce es únicamente la información proporcionada por el fabricante.
La empresa también ha destacado sus ambiciones en el ámbito civil, entre ellas una aeronave capaz de volar a Mach 5 para realizar trayectos intercontinentales 'en una hora', con un primer ensayo previsto para 2027 y pruebas completas del vehículo en 2030.