Japón prueba con éxito un cañón electromagnético que dispara proyectiles a velocidad Mach 7

Japón ha testado con éxito el primer cañón electromagnético que hace fuego desde un barco. Esta tecnología, también conocida como cañón de riel o railgun, puede disparar proyectiles a velocidades que rondan Mach 7, 7 veces la velocidad del sonido, contra objetivos como barcos, aeronaves y misiles, incluso hipersónicos.

“ATLA ha realizado la prueba de disparo de cañón de riel a bordo de un barco por primera vez en el mundo con la cooperación de la JMSDF [Fuerza de Autodefensa Marítima de Japón]. Para proteger a los buques contra las amenazas aéreas y de superficie con balas de alta velocidad, ATLA promueve firmemente el despliegue temprano de la tecnología de cañones de riel”, publicó este martes la Agencia de Adquisiciones, Tecnología y Logística del Ministerio de Defensa japonés, ATLA por sus siglas en inglés.

#ATLA has accomplished ship-board firing test of railgun first time in the world with the cooperation of the JMSDF. To protect vessels against air-threats and surface-threats by high-speed bullets, ATLA strongly promotes early deployment of railgun technology. pic.twitter.com/MG5NqqENcG

— Acquisition Technology & Logistics Agency (@atla_kouhou_en) October 17, 2023

Un cañón electromagnético es un tipo de arma que utiliza la energía electromagnética para acelerar un proyectil a velocidades extremadamente altas. En lugar de utilizar explosivos químicos o propelentes convencionales para disparar proyectiles, el cañón de riel aprovecha los principios de la fuerza electromagnética.

El Ministerio de Defensa de Japón quiere crear un sistema de intercepción de misiles basado en proyectiles magnéticos para hacer frente a la creciente amenaza que plantean las armas hipersónicas de China, Corea del Norte y Rusia, según publicó Nikkei Asia. La exitosa integración del cañón electromagnético en un navío es un paso en esta dirección que forma parte del Programa de Desarrollo de la Defensa de Japón lanzado en diciembre de 2022. Este programa enfatiza el desarrollo de la tecnología de cañones electromagnéticos para, en combinación con misiles de largo alcance, reforzar las capacidades defensivas de Japón frente a amenazas aéreas.

Los esfuerzos de Japón por desarrollar este tipo de arma comenzaron en 1990 con el Centro de investigación de sistemas terrestres, GSRC por sus siglas en inglés, creando un rudimentario cañón electromagnético de 16 mm. No fue hasta 2016 cuando ATLA inició el desarrolló de un prototipo, revelado en 2018, cuyos proyectiles alcanzaban una velocidad de Mach 6,5, 2.229 metros por segundo. La versión que Japón acaba de probar con éxito en alta mar tiene capacidades mejoradas sobre aquel primer prototipo, aunque los detalles técnicos son muy escasos.

Más allá de la velocidad de Mach 7, que equivale a 2.383 metros por segundo u 8.578 kilómetros por hora, se sabe que es un cañón de tamaño medio que dispara munición de acero de 40 mm y 320 gr. Estos proyectiles no contienen cargas explosivas, sino que su capacidad de hacer daño proviene de la energía cinética. Según Eurasian Times, utiliza cinco megajulios (MJ), o cinco millones de julios (J), de energía de carga y el objetivo de ATLA es que ésta llegue a 20 MJ. El arma pesa 8 toneladas y su cañón mide 6 metros.

Tampoco se conoce que navíos equiparan este armamento, aunque se ha sugerido que serán destructores. En tierra, ATLA planea equipar varios camiones con cañones de riel para contrarrestar los ataques de misiles hipersónicos.

El cañón electromagnético, que se espera entre en servicio en la segunda mitad de esta década, puede disparar munición a diferentes velocidades según la velocidad del objetivo y ajustando la potencia eléctrica. Japón no ha revelado cual es el contratista con el que ha desarrollado la tecnología, pero es conocido que Japan Steel Works Ltd. ha sido esencial en el proyecto.