Trayectoria

De colaboradora televisiva a actriz revelación en “La Encrucijada”

Tras años lejos del foco principal, la actriz asturiana vuelve con fuerza como uno de los rostros clave en la exitosa ficción de Antena 3

De colaboradora televisiva a actriz revelación en “La Encrucijada”
De colaboradora televisiva a actriz revelación en “La Encrucijada”Atresmedia

Hay figuras televisivas que parecen desaparecer sin dejar rastro y, de repente, reaparecen con un papel que lo cambia todo. Eso es justo lo que está viviendo Paula Prendes, la actriz asturiana que, tras unos años fuera del primer plano mediático, vuelve a sonar con fuerza gracias a su interpretación en “La Encrucijada”, la serie de Antena 3 que ha captado la atención de medio país. Muchos se preguntan qué fue de ella tras su etapa como colaboradora en “Zapeando” o reportera en “Sé lo que hicisteis”. La respuesta es más interesante de lo que parece.

Prendes lleva tiempo trabajando en distintos formatos y géneros, aunque su rostro se asoció durante años a programas de entretenimiento en los que ejercía con soltura como presentadora o colaboradora. “Zapeando”, “Amigas y conocidas”, “MasterChef Celebrity” o “Cocineros al volante” fueron espacios donde se mostró cercana, afilada y cómoda frente a cámara. Pero la televisión no era su única casa: mientras ganaba soltura como comunicadora, también iba construyendo un perfil actoral sólido, discreto, pero continuo.

Desde sus primeros pasos en “Somos cómplices”, una serie que emitió Antena 3 durante 80 episodios, hasta títulos como “Becarios”, “Velvet”, “Gran Hotel” o “Servir y proteger”,Paula ha tocado casi todos los registros en ficción nacional. Su paso por el cine, con películas como “Fuga de cerebros 2” o “Enterrados”, no fue explosivo, pero sí representativo de una profesional que nunca ha dejado de moverse, aprender y diversificarse. Aunque su perfil mediático se apagó momentáneamente, nunca abandonó los sets.

“La Encrucijada” ha sido el punto de inflexión que necesitaba. En la piel de Patricia Reyes, un personaje emocionalmente complejo, intenso y lleno de aristas,Paula Prendes ha vuelto a conquistar a crítica y público. Su interpretación de una mujer atrapada entre el deseo de ser madre y las intrigas familiares dentro del clan Oramas, añade una capa de humanidad que resuena con fuerza en cada episodio. Ya no es la cara simpática del entretenimiento, sino una actriz con peso narrativo.

El fenómeno de “La Encrucijada”, además, le ha devuelto visibilidad en el mundo digital. Con más de 150.000 seguidores en redes sociales, Paula ha sabido capitalizar este nuevo impulso para acercarse a su audiencia desde un lugar más maduro y auténtico. En sus publicaciones habla de belleza, trabajo, y momentos cotidianos sin imposturas, reforzando la idea de una profesional que nunca se fue del todo, pero que hoy regresa con las ideas más claras y el talento más afinado.

Redescubrir a Paula Prendes es también una invitación a mirar de nuevo esa televisión que mezcla entretenimiento y ficción, espectáculo y construcción artística. Su regreso no es un golpe de suerte ni una maniobra puntual, sino el resultado de una trayectoria con pasos firmes y silenciosos. “La Encrucijada” le ha devuelto foco, pero ella lo ha llenado de contenido. Y eso, en este contexto, vale más que una reaparición mediática. Es una reconquista.