RTVE ha anunciado las primeras cinco parejas de 'DecoMasters', el nuevo reality dedicado a la decoración que aterrizará en la parrilla de contenidos del ente público en el próximo curso televisivo 25/26. Entre sus filas, sorprende la incorporación de Isa Pantoja, certificando que seguirá ligada a la televisión pública tras su turbulenta salida del grupo Mediaset. La hija menor de La Tonadillera participará en este nuevo talent show producido por Shine Iberia ('MasterChef y Maestros de la Costura) junto a su pareja Asraf Beno, con quien ha sido padre de su segundo hijo Cairo en las últimas semanas. Además de Isa y Asraf, las otras cuatro parejas que se han revelado de 'DecoMasters' son: El actor y director Eduardo Casanova estará acompañado el actor Canco Rodríguez. La chef, empresaria y jurado de ‘MasterChef’ Samantha Vallejo-Nágera trabajará con su hermano Colate Vallejo-Nágera. La exmodelo Lucía Bosé y su hija, la fotógrafa y artista Palito Dominguín. Por último estarán los hermanos Jesús y Daniel Oviedo, conocidos por formar el dúo musical 'Gemeliers'.

Así será 'DecoMasters'

A lo largo del programa, 10 parejas deberán transformar espacios reales como viviendas, negocios o habitaciones con complicaciones comunes (como la falta de luz natural o el poco espacio) utilizando su ingenio, gusto estético y habilidades decorativas. Además de rediseñar y acondicionar estos entornos, los participantes compartirán con la audiencia consejos útiles y trucos prácticos para renovar cualquier rincón del hogar sin necesidad de grandes presupuestos. El formato busca no solo entretener, sino también inspirar al público con ideas accesibles para aplicar en el día a día. Durante toda la competición, las parejas estarán acompañadas por dos jueces expertos en interiorismo, quienes no solo evaluarán el resultado final de cada reto, sino que también ofrecerán orientación profesional para potenciar las capacidades de los concursantes. El objetivo: convertir espacios comunes en lugares únicos, funcionales y con personalidad, todo bajo la presión del cronómetro y el ojo crítico del jurado.