Hacienda castiga a los autónomos

Cuando el colectivo de trabajadores autónomos esperaba noticias positivas sobre la ampliación de sus deducciones por comidas y automoción, un nuevo jarro de agua fría les acaba de caer encima al anunciar el Ministerio de Hacienda que a partir de 2024 eliminará la reducción extraordinaria del 10% en el IRPF para aquellos trabajadores que coticen por el denominado sistema de tributación objetiva, también conocido como "de módulos”. La Agencia Tributaria solo va a permitir a partir de enero la reducción general del 5%, una medida que el sector considera lesiva para un colectivo maltratado fiscalmente, y muy frágil en ámbitos como el del comercio minorista. Mantenerse tributando como autónomo en España va camino de convertirse en una auténtica heroicidad. Sobre todo si se compara con el entorno. Mientras que aquí un autónomo puede pagar 294 euros al mes, en Inglaterra la cuota es de 14 euros, en Portugal no se paga y en Alemania tampoco si el ingreso es inferior a 1.700 euros mensuales. En nuestro país, por el contrario, un trabajador que facture 5000 euros al mes, por ejemplo, tiene que emplear 2.398 para IVA, gastos de gestoría, impuestos varios y cuota de autónomos. Las deducciones, por el contrario, son generalmente ridículas, cuando no casi inexistentes. Si a eso se suma la inflación creciente, la subida de los tipos de interés y todos los demás tributos y tasas estatales, autonómicas y locales a los que deben hacer frente como cualquier otro ciudadano, el resultado es que apenas queda dinero para vivir. Lo extraordinario es que sigan muchos emprendiendo con proyectos de todo tipo.