Indra afianza su liderazgo: vuelve a repetir como tecnológica más sostenible del mundo

Es indudable que las políticas ESG, que abordan las cuestiones medioambientales, sociales y de gobierno, ganan cada vez más protagonismo en el día a día de las empresas. Según un estudio del Pacto Mundial de Naciones Unidas, nueve de cada diez compañías españolas contribuyen a los Objetivos de Desarrollo Sostenible y más del 80% de las cotizadas de nuestro país se ha fijado objetivos tangibles en este ámbito.

Sin embargo, solo unas pocas elegidas se erigen como líderes ESG a nivel mundial y menos aún son capaces de mantener el éxito que supone hacerlo mejor que el resto de compañías en un entorno global, cambiante y cada vez más exigente. La tecnológica Indra ha conseguido esta enorme proeza y por tercer año consecutivo ha sido número uno del sector de Servicios de TI en el Dow Jones Sustainability Index World.

Pese a la creciente competencia y complejidad de este índice de referencia mundial en sostenibilidad, Indra logra, con 87 puntos sobre 100, la mejor calificación de su sector por tercer año consecutivo, según la evaluación de Standard & Poor’s (S&P).

«Estos extraordinarios resultados suponen un reconocimiento al compromiso de Indra con la excelencia y la mejora continua en materia ESG y al esfuerzo que estamos realizando para dar respuesta, a través de la tecnología, a los retos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030, para facilitar la transición hacia una economía baja en carbono y para generar un impacto positivo en las personas y el planeta», señala Marc Murtra, presidente de Indra.

El liderazgo de Indra abarca todas las grandes áreas evaluadas por S&P: alcanza la mejor puntuación del sector en los pilares medioambiental y social y el percentil 99 en gobierno corporativo.

A nivel medioambiental, Indra ha obtenido la mayor nota posible (100 puntos) en estrategia climática, emisiones, economía circular y uso de recursos y agua. En cuanto al pilar social, destacan las prácticas laborales y la gestión de la relación con los clientes con la máxima puntuación, que rozan también sus prácticas en Derechos Humanos, atracción y retención de talento, seguridad y salud laboral, y protección de la privacidad (percentil 99).

Sostenibilidad, en el corazón

Con respecto al gobierno corporativo, consigue la calificación más elevada en ética, estrategia fiscal y gestión de la innovación, y una excelente posición en seguridad de la información y ciberseguridad (percentil 96), ámbitos críticos para la compañía.

Estos resultados son fruto del compromiso integral de Indra con la sostenibilidad, que está en el centro de su cultura y su estrategia. La mirada de Indra está puesta de forma permanente en el futuro, buscando anticiparse a las necesidades de las comunidades en las que está presente. Y uno de los objetivos compartidos por todas ellas es lograr un desarrollo sostenible, siendo la tecnología una herramienta imprescindible para lograrlo.

«Sin duda, la sostenibilidad tendrá un papel relevante en la hoja de ruta de Indra para los próximos años, que estamos definiendo en nuestro plan estratégico Leading the Future. No solo queremos seguir mejorando el desempeño ESG para mantener nuestro liderazgo, sino que también queremos ser el aliado tecnológico para la sostenibilidad de nuestros clientes», destaca José Vicente de los Mozos, consejero delegado de Indra.

Para asegurarse de que este compromiso cala en todas las áreas de la empresa, la dirección de Sostenibilidad, que lidera Manuel Ausaverri, Chief Strategy Office (CSO) de Indra, ha entrado a formar parte del Comité de Dirección, cuyos miembros cuentan con incentivos sobre sus objetivos ESG. Además, gran parte de la plantilla se ha formado en materia de sostenibilidad y el 97% de los profesionales y el 100% de los proveedores se han formado en ética y transparencia.

Todo este trabajo se materializa en los progresos tangibles que ha hecho la compañía en los últimos años. Así, a nivel climático ha reducido un 26% sus emisiones de CO2 y avanza a buen ritmo para neutralizar las emisiones de sus operaciones en 2040 y ser Net Zero, es decir conseguir cero emisiones netas, en 2050. Además, está actuando para reducir el impacto medioambiental de sus productos y hacer que sean más sostenibles aplicando el ecodiseño.

En relación con las personas, Indra ha disminuido la brecha salarial un 3% y ha aumentado el porcentaje de mujeres contratadas con perfiles STEM; ha superado el millón de horas de formación y promovido el desarrollo de los profesionales para impulsar el crecimiento interno y atraer y retener al mejor talento tecnológico.

Gracias a los múltiples ejemplos de soluciones de Indra con impacto en ámbitos como la movilidad sostenible, la eficiencia energética, la seguridad o la protección medioambiental, también ha sido incluida por el Carbon Disclosure Project (CDP) entre las empresas líderes en la lucha contra el cambio climático con la mayor calificación posible, «A List».