Sevilla

La ganga ibérica crece en Doñana y empieza a colonizar las Marismas del Guadalquivir

La ganga ibérica (Pterocles alchata) crece en Doñana y empieza a desplazarse hacia el sureste para colonizar también otras áreas de las Marismas del Guadalquivir en su expansión hacia las provincias de Sevilla y Cádiz.

Los trabajos realizados por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio para el seguimiento de esta ave esteparia catalogada como vulnerable han constatado la presencia de hasta 108 ejemplares dentro del espacio natural y otros 93 fuera del mismo, una cifra que supone un incremento de 74 individuos en comparación con el censo registrado en el ejercicio 2010.

Según ha informado hoy en un comunicado la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente en Huelva, en estas zonas estas aves utilizan como hábitats una marisma fluvial alta con presencia de almajos.

La variabilidad de esta zona del Guadalquivir, tan dependiente de las precipitaciones y con largos periodos de inundación y sequía, provoca transformaciones completas del paisaje y, por tanto, del ecosistema en el que se instala la especie.

Estos cambios son los que motivan que la ganga ibérica se traslade hacia espacios secos, de ahí que en años especialmente húmedos abandone Doñana para dirigirse a enclaves de almajos, entre áreas de regadío intensivo.

La ganga ibérica (Pterocles alchata), catalogada como vulnerable, está incluida en el marco protector del Plan de Recuperación y Conservación de Aves Esteparias que desarrolla la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio.

En la actualidad, Andalucía es la comunidad autónoma con mayor número de especies de este tipo en España, con un total de 25, de las que 15 se encuentran amenazadas.

Estas aves, en general, encuentran su hábitat natural en las estepas y campiñas de la región, superficies llanas o levemente onduladas sin apenas arbolado y con predominio de cultivos herbáceos, en especial, de cereales.

La conservación y mejora de estos puntos de la geografía andaluza se erige, en este sentido, en esencial para garantizar la preservación de estas especies.

Por ello, como expone la delegada territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Josefa González, uno de los pilares básicos en el programa de recuperación de las esteparias es el compromiso y el apoyo de los agricultores, ganaderos y propietarios de fincas.

"Sin ellos, sin su colaboración, sería una tarea imposible el mantenimiento de estos ecosistemas y, por ende, de las condiciones de vida de especies como la ganga ibérica".