El ayuntamiento de Lucca, localidad situada en la región italiana de la Toscana, ha aprobado una norma que prohíbe a los restaurantes utilizar captadores para atraer clientes en el centro histórico de la ciudad. La medida responde al incremento del turismo y tiene como objetivo regular ciertas prácticas comerciales en las zonas más frecuentadas por visitantes.

La figura del buttadentro, nombre que en italiano hace referencia a quienes invitan activamente a los peatones a entrar en un local, se ha vuelto más común en distintas ciudades turísticas del país. En el caso de Lucca, el consistorio ha decidido limitar su presencia en espacios donde la afluencia de visitantes ha aumentado de forma notable, como en la Piazza dell’Anfiteatro.

Remo Santini, teniente de alcalde y responsable de turismo del ayuntamiento, indicó que la medida busca garantizar que las personas puedan decidir libremente dónde comer. Según explicó, la mayoría de los restaurantes no emplean captadores, pero algunos comenzaron a hacerlo en el último año, especialmente en los puntos con más tránsito turístico.

El decreto prohíbe de manera generalizada el uso de personal que se dedique a invitar activamente a los peatones a entrar en los restaurantes dentro del perímetro histórico. La normativa contempla sanciones para quienes la incumplan, entre ellas la suspensión durante tres días del permiso para colocar mesas en el exterior del local. También se estudia la posibilidad de imponer multas.

Aumento del turismo y presión sobre el espacio público

El aumento del turismo en Lucca ha sido significativo. En 2024, por primera vez, se alcanzó el millón de reservas hoteleras. Entre enero y abril de 2025, los datos muestran un incremento del 7,5 % respecto al mismo periodo del año anterior. La ciudad, conocida por su muralla renacentista y su patrimonio histórico, también ha sido escenario de producciones cinematográficas recientes, como una película de Peter Greenaway con participación de actores como Dustin Hoffman y Helen Hunt.

La preocupación por los efectos del turismo ya había sido expresada en 2023, cuando la sección local del Partido Democrático pidió al ayuntamiento una estrategia para preservar la calidad de vida en el municipio. Algunos medios, como La Nazione, señalaron entonces que el número de buttadentro estaba creciendo en zonas específicas de la ciudad.

Lucca no es la única localidad que ha adoptado medidas similares. En mayo, la ciudad de Como también prohibió esta práctica en sus áreas más turísticas, incluyendo restaurantes, bares y servicios como los taxis acuáticos. Según su alcalde, Alessandro Rapinese, el objetivo era evitar que los turistas se sintieran abordados de forma constante mientras recorrían la ciudad.

En el caso de Lucca, las autoridades locales consideran que esta decisión permitirá mantener unas condiciones determinadas en las zonas más visitadas, en el marco del aumento de la actividad turística en la ciudad.