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Death Stranding 2: On the Beach tiene una función oculta que muy pocos conocen

Existe una mecánica secreta que permite que las armas disparen balas letales

Death Stranding 2: On the Beach tiene una función oculta que muy pocos conocen Difoosion

Desde su lanzamiento, existían muchas expectativas con Death Stranding 2 después de que la primera entrega del título de Hideo Kojima fuese todo un éxito. Esta secuela apuesta también por una jugabilidad en la que la acción pasa a un segundo plano y en el que la estrategia es clave, con el sigilo y la planificación como principales armas. Sin embargo, eso no significa que no haya más posibilidades.

Una de ellas todavía no ha sido descubierta por muchos jugadores, y es que Death Stranding 2 esconde una función secreta que cambia por completo este enfoque del juego. Aunque desde el principio el jugador cuenta con armas como rifles de asalto o escopetas, el título te deja claro que su munición no es letal porque matar a alguien en este universo tiene consecuencias desastrosas. Sin embargo, sí existe una forma de convertir esas armas en letales.

Cómo activar las armas letales en Death Stranding 2

Con esta mecánica oculta se puede convertir cualquier arma en letal, y lo mejor de todo es que hacerlo es muy sencillo. Lo único que tienes que hacer es abrir el menú de armas y mantener pulsados los botones R2 + L2 + Círculoo RT + LT + B en mando de Xbox hasta que la rueda de selección se vuelva completamente naranja. Esa es la señal de que los disparos desde ese momento podrán acabar con la vida de un enemigo humano.

Eso sí, una vez activas esta opción el juego reacciona a través de un personaje llamado Dollman, que después de que empieces a matar te lleva la cuenta de asesinatos e incluso te intenta convencer de que dejes de hacerlo. Además, más allá del componente narrativo que parte de la premisa de evitar el conflicto siempre, cuando asesinas hay más consecuencias jugables.

Si un personaje muere y su cuerpo no es incinerado a tiempo, puede provocar un voidout, una gigantesca explosión que deja un cráter y hace que esa zona quede inutilizada durante un tiempo. Esta mecánica ya estaba presente en el primer juego, pero hay que tenerla en cuenta siempre que decidas activar las armas letales.

En resumen, este cambio provoca que el tono del título de un giro de 180 grados, permitiendo a los jugadores alterar drásticamente la forma de jugar. Eso sí, el juego mantiene su mensaje de que debes tener cuidado, porque asesinar a sangre fría siempre tiene consecuencias.