Streamers

IlloJuan analiza cuánto trabajan los principales streamers de España comprobando sus horas de directos

El creador de contenido malagueño comparó sus cifras con las de otros creadores como ElXokas o Auronplay

IlloJuan analiza cuánto trabajan los principales streamers de España comprobando sus horas de directos
IlloJuan analiza cuánto trabajan los principales streamers de España comprobando sus horas de directosTwitch IlloJuan

El debate sobre lo exigente que es el trabajo de un creador de contenido siempre ha estado muy presente en redes. Muchos aseguran que los usuarios que se dedican a ello no pueden quejarse porque son unos privilegiados, mientras que otros defienden que el estrés al que se someten es altísimo.

IlloJuan en su último directo, de forma involuntaria, ha vuelto a alimentar este debate repasando cuántas horas pasan en directo algunos de los streamers más importantes del panorama de nuestro país.

Aunque esta no es una prueba irrefutable de lo que significa el trabajo de creador de contenido, sí ayuda a poner en contexto las horas que conlleva.

IlloJuan habla de las horas de directo de algunos streamers

La cuenta de TikTok sestradaa11jr ha sido la encargada de recoger las palabras del malagueño, que empezó poniéndose él mismo de ejemplo. Desde el 17 de noviembre de 2016 hasta este año 2025, IlloJuan ha retransmitido 8.249 horas. Si hacemos la media, esto significa unas 916 horas al año.

En comparación con las 1.800 que se estima que trabaja una persona en España con contrato de jornada completa, el dato refleja que el streamer acumula más o menos la mitad. Aun así, es justo decir que aquí se está teniendo solo en cuenta el tiempo delante de cámara emitiendo directos y no cualquier otra actividad vinculada con el trabajo.

Si cambiamos entre los diferentes streamers mostrados por el andaluz y teniendo siempre en cuenta que son horas anuales, Knekro ha trabajado unas 1.975desde 2017, ElXokasunas 1.402desde 2016, Rubiusunas 909 desde 2016 y Auronplay unas 830 desde 2019.

Estos datos ayudan a esclarecer aún más la realidad de un debate que parece que nunca tendrá final, porque otros baremos como el estrés, la exigencia o el tiempo que se dedica a este trabajo sin que nadie lo sepa nunca serán medibles.