Elecciones

PP y Cs niegan que los resultados electorales afecten a la «estabilidad» de la Junta

El hundimiento del partido naranja no abre una brecha en el Ejecutivo autonómico y ambas formaciones insisten en que el Gobierno andaluz está «cohesionado». Vox evita el ataque directo y subraya que es «leal» a los pactos

El líder de Ciudadanos en Andalucía, Juan Marín
El líder de Ciudadanos en Andalucía, Juan MarínlarazonEFE

El batacazo electoral de Ciudadanos y el ascenso fulgurante de Vox han trastocado el tablero político andaluz, aunque los socios de gobierno en la Junta se empeñaron ayer en defender que los resultados de los comicios del pasado domingo no afectarán al pacto que mantienen en el Ejecutivo autonómico. La fotografía que arrojan las elecciones es bien distinta en ambas formaciones. El PP ha conseguido 86.806 votos más que en la pasada convocatoria de abril, recuperando la segunda posición tras el PSOE y obteniendo 15 diputados, tres más que las anteriores elecciones. Por su parte, el partido naranja pasa a ocupar la quinta posición, perdiendo 467.288 sufragios y ocho diputados, todo ello a pesar de tener ya responsabilidad de gobierno en la Junta y más visibilidad al ostentar su líder en la comunidad autónoma, Juan Marín, la vicepresidencia del Ejecutivo, con competencias tan significativas como turismo y justicia.

Precisamente, Marín valoró los resultados del partido a nivel nacional, calificándolos de «malísimos sin ningún tipo de paliativos ni excusas» y reconoció que «no hemos sido capaces de dar la vuelta a los sondeos». «Tenemos que hacer una autocrítica lo suficientemente profunda como para salir fortalecidos de esta circunstancia», añadió, además de subrayar que «los que venimos del mundo del deporte sabemos que solamente se aprende de las derrotas» y en esta ocasión en Ciudadanos «hemos salido derrotados y tenemos que salir a prepararnos para jugar el siguiente partido».

Sí se pronunció de una manera más expresa sobre el bipartito la consejera de Empleo, Rocío Blanco (Cs), quien negó «rotundamente» que los resultados electorales vayan a afectar a la Junta. «No son palabras vacías ni falsas, tenemos un proyecto común que nos une a todos, que es Andalucía, venimos con la ilusión de trabajar por y para los andaluces, para mejorar un poquito su proyecto de vida», aseguró, al tiempo que remarcó que «somos un equipo muy unido y tremendamente cohesionado».

En la misma línea se pronunció la secretaria general del PP-A, Loles López, quien insistió en que la caída de Ciudadanos no afectará ni al Gobierno andaluz ni a la «estabilidad» en la comunidad autónoma. En declaraciones a Canal Sur Radio, destacó que tras estas elecciones e el PP se consolida «claramente» como segunda fuerza política tanto en Andalucía como en España.

Andalucía cuenta, según recalcó, con un Gobierno «asentado, que funciona y que representa el único caso de estabilidad», con la aprobación de dos presupuestos autonómicos. López se mostró segura de que tanto Ciudadanos como Vox –formación que tiene un acuerdo de investidura con el PP– saben qué necesita Andalucía «por encima de ideologías políticas». De hecho, consideró que el importante aumento de Vox en votos y escaños también se ha debido a que en Andalucía está apoyando las políticas del Gobierno del cambio.

El partido de Santiago Abascal, de su lado, sacó pecho por los resultados cosechados, atribuyéndolos a sus «grandes líderes nacionales» y a «una infantería de voluntarios que dan una ventaja notable, lo que sirve para contrarrestar otros inconvenientes». El portavoz parlamentario, Alejandro Hernández, subrayó que aprietan a la Junta «en función de los acuerdos que tenemos alcanzados», agregando que en Vox son «leales a los pactos».