Andalucía

Eximen al alcalde de Sevilla de declarar como testigo en el caso de desfalco en Lipasam

El Juzgado decidirá si le convoca o no una vez haya testificado la gerente de la entidad

Imagen de archivo de una reunión del alcalde, Juan Espadas, con profesionales de Lipasam en el parque auxiliar de Sevilla Este
Imagen de archivo de una reunión del alcalde, Juan Espadas, con profesionales de Lipasam en el parque auxiliar de Sevilla EstelarazonAyuntamiento de Sevilla

El Juzgado de Instrucción número 14 de Sevilla, que investiga el desfalco de 1.012.275 euros en las cuentas de la sociedad Limpieza Pública y Protección Ambiental (Lipasam), perteneciente al Ayuntamiento hispalense, a manos del excontable de la entidad; ha dejado sin efecto su decisión de citar como testigo al alcalde, el socialista Juan Espadas, al ser presidente del consejo de administración de la citada empresa, abogando por decidir si le convoca o no una vez haya testificado la gerente de la entidad, Virginia Pividal, según fuentes del caso.

En su providencia inicial, fechada el pasado 5 de junio, el juzgado cita a declarar como investigada el 3 de julio a María del Valle G.V., fijando también para esa jornada la comparecencia de Juan Espadas como testigo a cuenta de su cargo como presidente del consejo de administración de Lipasam, así como la declaración de un testigo más. Ya para el 8 de julio, fija las comparecencias de varios testigos entre los que figura la directora gerente de Lipasam, Virginia Pividal; y para el 9 de julio cita a varios testigos más.

La mencionada providencia del juzgado llegaba después de que Vox, que figura como acusación popular en estas diligencias judiciales, solicitase precisamente la comparecencia del propio alcalde, toda vez que finalmente, la citada instancia judicial ha optado por dejar sin efecto la citación de Espadas como testigo, para tomar una decisión una vez comparezca en dicha calidad la directora gerente de Lipasam.

En cuanto a las diligencias en cuestión, cuando el excontable de Lipasam Manuel M.G. declaró como investigado ante la citada instancia judicial, este hombre, contable en Lipasam desde 1989 y que cobraba unos 2.500 euros mensuales, aseguraba al juez instructor que desde 2008 incurrió en dicho desvío de los fondos de la empresa municipal porque estaba pasando por “un mal momento económico”.

En ese sentido, Juan Espadas exponía meses atrás ante el pleno del Ayuntamiento que el excontable de Lipasam, que pidió su baja voluntaria en la empresa y ha puesto a disposición del juzgado dos fincas urbanas de su propiedad, ingresó hace "30 años" en la empresa como mero trabajador, es decir no era "un directivo nombrado por ningún gobierno" ni ningún cargo "a dedo", toda vez que por su trayectoria en la empresa y como encargado de "supervisar con el máximo rango" la contabilidad de la empresa "había generado un espacio de confianza entre sus responsables directos", que han sido "varios" a lo largo de los años.

Según Espadas, el excontable conocía “muy bien” el funcionamiento financiero de Lipasam y desviaba dinero de la empresa a su cuenta mediante un “mecanismo perverso y muy sofisticado” que “ha escapado a todas las auditorías” realizadas en la empresa en los últimos años.

Fue el 20 de diciembre del año pasado, en concreto, cuando la empresa municipal interpuso su denuncia inicial contra este hombre, una vez constatado que el ya extrabajador de Lipasam pudo realizar de forma supuestamente irregular transferencias a una cuenta personal desde 2014 por un importe de 422.512 euros, unos hechos que pueden ser constitutivos de un delito de malversación continuada de caudales públicos de especial gravedad, así como de un delito continuado de falsedad.

En un segundo escrito, el 8 de enero, como consecuencia de una segunda fase de las investigaciones y constatar que los hechos se remontarían a 2008 y la cuantía defraudada podría ascender a 1.012.275 euros, la denuncia inicial fue ampliada con tales aspectos.